El ayuntamiento de Puebla incrementará los costos de regularización para aquellos que realicen demoliciones de viviendas sin permisos en un 328 por ciento, con ello se espera evitar que se lleven a cabo obras sin las autorizaciones correspondientes.
Así lo dio a conocer el secretario de Movilidad y Desarrollo Urbano, Gabriel Navarro Guerrero, durante su presentación de propuestas para la conformación de la Ley de Ingresos para 2018 del ayuntamiento de Puebla, donde comentó que actualmente el costo de la regularización de la licencia de demolición por metro cuadrado es de 7.87 pesos, cifra que consideró es “muy baja”.
De este modo, se propuso se incremente la cifra a 33.50 pesos, para que a quienes no tengan una licencia de demolición les resultará dos veces más caro la regularización que tramitar los permisos.
Ya en entrevista, comentó que los regidores de la Comisión de Patrimonio y Hacienda Pública vieron “bien” incrementar el monto de la regularización, además de que están dispuestos a subir las sanciones en la Código Reglamentario Municipal (Coremun) para quienes incurran en irregularidades.
“El próximo año si no tienes un permiso y te quieres regularizar te va a costar el doble de lo que te hubiera costado la autorización, más una multa”, que aún está por definirse.
Ejemplificó que para una obra de 180 metros cuadrados el permiso de demolición costaría alrededor de 3 mil 21 pesos, pero su regularización sería de 6 mil pesos, es decir, el doble de lo que cuesta la licencia.
Avanza un 40% análisis de Ley de Ingresos 2018
Por separado, el regidor presidente de la Comisión de Patrimonio y Hacienda Pública, Gabriel Gustavo Espinosa Vázquez, indicó que la Ley de Ingresos para 2018 podría ser aprobada a finales de septiembre, pues actualmente llevan un análisis del 40 por ciento.
Asimismo, comentó que aún faltan las propuestas de dependencias que más recaudan como Tesorería, Catastro y Seguridad Pública.
Por último, confió en superar la Ley de Ingresos de 2017 que fue de 4 mil 083 millones de pesos, pues se espera una inflación del 7 por ciento.
Consideró que los legisladores federales deben modificar el cómo se está haciendo la distribución de recursos hacia los municipios, pues aseguró existe desventaja.
