Por Lorena González

En 2014, en México se tenía el registro de 36 conflictos mineros socioambientales, siendo Puebla el estado con más hechos de este tipo, con cinco, lo que representa el 13.8 por ciento del total nacional; son 19 entidades las que tienen esta problemática.

Así lo dio a conocer el investigador de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Paul Hersch Martínez, en el marco de la inauguración de la exposición itinerante “El oro o la vida”, quien dijo que Oaxaca y Sonora, presentan cuatro conflictos cada uno; mientras Chihuahua tiene tres.

Colima, Jalisco y Coahuila poseen dos cada uno, en tanto, Michoacán, Chiapas, Guerrero, Durango, Guanajuato, Zacatecas, Baja California Norte, Querétaro, Veracruz y Morelos tienen uno.

En el caso de Puebla, los conflictos están en San Miguel Tuligtic, con la Minera de oro Gavilán, Alamden Minerals de Canadá; en Zautla, con el Proyecto minero de oro La Lupe, JDC Minerales de China; Tetela de Ocampo, con la Minera de oro, Grupo Frisco de México; Tlatlauquitepec, con el Proyecto El Aretón, Minera de oro Autlán de México y en la Sierra de Tentzo, con la minera Autlán y Australian Minerals Group de México y Australia.

Hay que mencionar que en 2015, los pobladores de Teteles lograron cancelar la exploración y extracción de oro que pretendía el Grupo Frisco. La empresa señaló que se retiraba del lugar por problemas financieros.

 

Van 54 asesinatos en el país

En entrevista con Ángulo 7, Hersch Martínez señaló que –de acuerdo a la investigación que hizo pública en el documento “Patrimonio Biocultural  y Megamineria: un reto múltiple”— por los conflictos mineros se han registrado 54 asesinatos en el país, además de amenazas, detenciones y agresiones físicas hacia opositores de estos proyectos; en el caso de Puebla se tiene el dato de Antonio Esteban Cruz, quien se  opuso a proyectos mineros de la Sierra Norte, como uno de los asesinados.

Según la investigación, en los últimos años, se ha intensificado la entrega de concesiones,  pues de  acuerdo con cifras de la Secretaría de Economía, hasta junio de 2014, había 25 mil 566 títulos que corresponden a 25.7 millones de hectáreas, es decir, el 12.85 por ciento de la superficie del país, la mayoría para explorar o explotar minerales a cielo abierto, una de las técnicas más perjudiciales.

Agregó que varias de estas concesiones se superponen con zonas arqueológicas  y más de la mitad se encuentran en zonas actuales de cultivo, con riesgo de ser destruidas e inhabilitadas para siempre. Otras coinciden con territorios donde aún se conserva flora y fauna silvestre, incluso zonas consideradas de reserva ecológica.

 

No se debe permitir la minería a tajo abierto

El investigador precisó que la minería a tajo abierto, al utilizar tóxicos, se pone en riesgo la salud de los habitantes de estas comunidades, además de afectar de manera irreversible a montañas y ríos “que quedan huecos”.

Hersch Martínez mencionó que un caso emblemático es el de la zona  arqueológica de Xochicalco en Morelos, que a pesar de ser declarada patrimonio cultural de la humanidad, en la misma fue otorgada una concesión a la empresa minera canadiense Alamos Gold.

Puntualizó que a raíz de este caso se motivó a una movilización social que recabo 16 mil firmas contra el proyecto, las cuales fueron entregadas a la embajada de Canadá sin que todavía haya alguna respuesta formal.

Además, dijo que gracias a la movilización social contra esta práctica existen países y regiones que han prohibido  la minería a cielo abierto.

Cabe mencionar que la exposición se encuentra en la Casa de las Culturas Contemporáneas, ubicada en la 2 norte 1006 del Centro de la ciudad de Puebla y estará hasta la primera semana de junio.

Foto: EsImagen 

Fundadora y directora editorial del portal de noticias Ángulo 7. A los 14 años decidió que quería dedicarse al periodismo. Estudió Comunicación en la Universidad Iberoamericana de Puebla. Fue becada...