Pobladores de San Bernardino Tlaxcalancingo, junta auxiliar de San Andrés Cholula, señalaron que autoridades están incumpliendo su palabra de no impulsar una red hidráulica, por lo que acusaron imposición de una obra que es “meramente recaudatoria”.
En rueda de prensa, Armando Coyotl Osorio, Antonio Toribio Pajaro y Moisés Coyotl Cuaya, reiteraron que el ayuntamiento “pretende imponerles” un servicio que no pidieron los ciudadanos, pues, antes de implementarlo, ya les están cobrando hasta 15 mil pesos por familia con el argumento de que deben desde 2010.
Señalaron que el 6 de noviembre se realizó una asamblea en la que estuvieron presente los pobladores, el edil auxiliar José Margarito Nestor Elías Amaxal, Agustín Arias y Alfredo González, director de Agua Potable y secretario de Obra Pública, respectivamente, donde se acordó que no se haría un proyecto en el que no estuvieran de acuerdo los ciudadanos, pero no se ha cumplido.
“A pesar de que se firmó un documento con dicho acuerdo, ellos no han respetado, este proyecto es meramente recaudatorio y sin poner los servicios que están obligados a darles, y aunque no los pongan quieren recaudar de manera forzosa, nosotros estamos proponiendo un proyecto y no lo han aceptado”, declararon.
Llevar servicio a zona de “alta” plusvalía
Coyotl Osorio sostuvo que no están en contra de que se ejecuta cualquier tipo de obra, sino “de la imposición” que el municipio sanandreseño quiere realizar, pues el agua no será para los habitantes de San Bernardino Tlaxcalanzingo, sino para los fraccionamientos de “alta plusvalía” que se han construido en esa zona.
Refirió que las autoridades están buscando la manera de beneficiar “sólo a unos cuantos”, pues la mayoría de esa junta auxiliar se dedican al sector agrícola y necesitan del agua para sus tierras.
Agregó que el gobierno municipal pretende “imponerles” un pago anual de 7 mil pesos por el sistema de agua potable, con el argumento de que se condonarán los 5 años anteriores, pero no garantiza la continuidad y calidad del recurso.
En tanto, Coyotl Cuaya puntualizó que en algunas colonias de la junta auxiliar los pobladores han detenido los trabajos, ya que –dijo– en caso de que el proyecto se concluya provocará un cambio en el tipo de zona, pues elevara los impuestos para los habitantes, con el fin de que “si no podemos pagar es mejor vender las tierras”.
Finalmente, aseveró que desde 6 de noviembre, los funcionarios municipales no se han acercado con los pobladores, por lo que –reiteró– no se hará una obra sin el consentimiento de las personas, al afirmar que están abiertos al diálogo.
