Este domingo, calles del Centro Histórico lucieron despejadas de ambulantes y transporte público, pues continúa el operativo para impedir la instalación de comerciantes informales, por lo que algunas calles siguen resguardadas por elementos.
En esta ocasión, poblanos se abastecieron de algunos utilitarios típicos de la temporada decembrina en comercios establecidos, aunque esperaban adquirir ciertos productos con ambulantes, pues en ocasiones resulta “más económico”.
La presencia de veintenas de uniformados, así como de varias de sus unidades, en calles como la 8 y hasta la 16 poniente, desde la 11 norte-sur a la 2 norte-sur; avenidas Reforma, 5 de Mayo, y de la 3 a 9 norte-sur causaron extrañeza e incertidumbre entre los ciudadanos que caminaron por la zona.
En dichas vialidades, que permanecen cerradas, fueron coladas entre una y dos carpas que son utilizadas por los uniformados, así como sanitarios móviles.
Aunque algunos locatarios, manifestaron que el retiro de informales beneficia la entrada de compradores a sus comercios, destacaron su preocupación ante la falta de acuerdo, pues no descartan que se suscite un nuevo enfrentamiento entre los ambulantes y los elementos, como ocurrió en julio pasado, que dejó un saldo de 13 heridos.
El pasado martes, alrededor de 500 policías estatales y municipales montaron un operativo desde las 4 de la mañana para impedir el regreso de ambulantes, que fueron retirados de las calles del Centro Histórico durante el pasado fin de semana, bajo el pretexto del “El Buen Fin”.
