Cada migrante que logra llegar a Estados Unidos es un sueño cumplido, porque representa la esperanza de su familia y de su país, aseguró Norma Romero, líder de “Las Patronas”, quienes llevan 21 años apoyando a personas en busca del “sueño americano”.
“Al principio nos llamaban locas por ayudar a la gente que a diario va a bordo del tren conocido como ‘La Bestia’, pero no nos importó, porque lo hacíamos solo por eso, por ayudar”, expresó.
Lo anterior durante su participación en La Ciudad de las Ideas, donde afirmó que las 14 mujeres que conforman el grupo continuarán regalando comida a las personas que todos los días pasan por La Patrona, municipio de Amatlán los Reyes, en Veracruz, en su camino hacia la frontera con Estados Unidos.
Relató que fue en 1995 la primera vez que le regaló comida a unos hombres que estaban esperando el tren, y les preguntó por qué huían de su país y pretendían llegar a otro, entonces –explicó- le dijeron que por falta de empleo, comida y educación, a partir de ahí, apoya con comida “y lo seguirá haciendo”.
No quiero cambiar el mundo, quiero cambiar yo
“En ese entonces, los problemas que ellos me contaban no me eran familiares, mi familia y yo somos cañeros, comida y trabajo nunca nos faltó; pero pronto, también se nos fueron acabando las oportunidades”, expresó.
Luego de unos años –agregó- no solo veíamos a hombres arriba del tren, sino mujeres y familias enteras, quienes escapaban ahora de la violencia, algo que a México aún no le pasaba, “pero no tardó mucho y también nos pasó”.
Con el tiempo –abundó- tuvimos que informarnos sobre leyes, ahora le damos seguimiento a los migrantes; “no somos una asociación civil, no somos polleras ni hacemos esto por dinero, lo hacemos solo por ayudar”.
“Unos todavía nos dicen si creemos que con dar comida cambiaremos el mundo; y yo les digo: yo no quiero cambiar el mundo, quiero cambiar yo”.
