En medio de protestas magisteriales, suspensión parcial de actividades docentes en varias entidades, bloqueos de carreteras, rechiflas, gritos, denuestos en contra de Aurelio Nuño Mayer, reclamos mediáticos y exigencias para que de cualquier forma el gobierno acabe con las protestas de los docentes externadas por representantes de diversas cúpulas de organismos empresariales y nuevos incrementos en los precios de la gasolina y luz, organizaciones políticas y sociales “piden” al responsable de la administración, defender libros de texto gratuito y contenidos de educación sexual vigentes en planes y programas de estudio de educación básica y media superior.
La “petición” que formulan algunas asociaciones de profesionales en sexología no es gratuita. Previamente, asociaciones de padres de familia vinculadas a escuelas confesionales agrupadas en torno al Frente Nacional por la Familia (FNF), filial de la Unión Nacional de Padres de Familia (UNPF), “habrían” señalado un rechazo a los “nuevos” libros de texto gratuito “de preescolar, primaria y secundaria que contienen información y juegos vinculados al género de los niños, pero que pudieran confundirlos“, libros que pretenden mutilar (goo.gl/weuOgz).
Nada nuevo bajo el sol, los mismos argumentos esgrimidos por los mismos actores. Ocho años atrás, organizaciones civiles como Pro-vida, la Coalición Ciudadana por la Familia y la Vida (Cofavi), Suma tu Voz y militantes del Partido Acción Nacional (PAN) “deshojaron ejemplares de libros de biología del primer grado de secundaria de la SEP, los cuales arrojaron a una tina de metal y les prendieron fuego (goo.gl/SUrH35). “Porque no educan sobre los peligros que implica el uso de anticonceptivos y promueven el condón ” (goo.gl/SzqpSD).
Pero, independiente de la reserva en materia de planes y programas de educación básica y normal, que el artículo 3 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos establece para la federación en toda la república y de la negativa al uso del libro de texto gratuito propio de las escuelas particulares de corte confesional, la tasa media de natalidad en el país que reporta el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Imegi) “de mujeres con menos de 20 años al ocurrir el parto” sería en 2016, del 19.1%, (24.5 en Chihuahua, 22.8 en Coahuila, 22.5 en Guerrero, 21.9 en Nayarit, 21.6 en Durango, 20.6 en Sonora, 20.2 en Veracruz y 20.1 en Campeche y Chiapas).
Una de cada 5 madres es menor de 20 años y en el caso de Chihuahua, una de cada 4. El resumen ejecutivo “Estado de las madres en México: embarazo y maternidad en la adolescencia” publicado por la organización Save the Children (goo.gl/0qvnUF), justifica la inclusión de la educación sexual en las escuelas desde la más tierna infancia.
Citas en contexto: “México es el país de la OCDE con la mayor tasa de natalidad en mujeres adolescentes: ocurren 77 nacimientos por cada mil mujeres de entre 15 y 19 años.” “Tan sólo los primeros años de este sexenio (2013-2014) se registraron 394 nacimientos en niñas de 10 años”, “el 11.8% de las mujeres que abandonaron la educación media superior reportaron que el embarazo o tener un hijo fue la principal causa de su deserción. En contraste, sólo el 2.3% de los hombres reportaron ésta como la principal causa de su deserción en este nivel educativo”, “59% de las adolescentes de 12 a 19 años de edad con antecedente de embarazo sólo cursó hasta la secundaria”.
Sin embargo, a pesar de las amenazas de la UNPF y de las sugerencias que emitiera Felipe Arizmendi Esquivel, funcionario de la iglesia católica en San Cristóbal de las Casas, para no permitir, “que sea sólo la escuela la que trate estos asuntos, sino que hay que dialogar sobre esto en la familia y en la catequesis”. El reporte anual que realiza Save the Children, cuya fuente la constituyen documentos oficiales, rememora que “más del 53% de las y los adolescentes identifica su escuela como el lugar en donde recauda mayor información sobre sexualidad”.
Congruente con su responsabilidad, que madres y padres de familia se ocupen y preocupen por la educación de sus hijos, no obstante la voz del jerarca de la iglesia apostólica y romana reconoce, refiriéndose a los libros de texto: “los he leído con detenimiento. Hay cosas que preocupan y que deberían revisarse, pero en general no están tan mal como nos habían alertado en las redes sociales. Hay una información suficiente, científica y respetuosa, sobre las diferencias sexuales, y algo de formación ética, aunque sesgada en algunos puntos, incompleta y peligrosa.” (goo.gl/jAQgDU).
A confesión de parte, relevo de pruebas. Arizmendi lee, analiza, juzga y emite un veredicto que debiese servir de referencia a los y las feligresas católicos(as) en Nuevo León. Si bien considera que a juicio de la fe que profesa, sus correligionarios(as) debiesen inmiscuirse en temas que aunque forman parte de los derechos humanos de niñas, niños y adolescentes, les interesen y los pudiesen mediante el diálogo canalizar conforme a sus principios.
Desnuda a quienes quieren encender la hoguera y deja claro que a éstos defensores de la moral, sólo les interesa nutrir las manifestaciones a las que convoca el Frente Nacional por la Familia ( 1 y 24 de septiembre) para oponerse a los matrimonios igualitarios. Otro frente en contra de Enrique Peña Nieto y Aurelio Nuño. Dios los agarre confesados.
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