Por Edgar Guzmán Uribe @Edd_g89
En partido amistoso, el Puebla de la Franja se llevó la victoria ante el Boca Juniors por 1-0, como parte de la reinauguración del estadio Cuauhtémoc, que fue abarrotado por la afición después de una larga espera por las obras.
Debido a un pequeño incidente con el portero del club argentino, quien no se quería cambiar su sudadera por la de otro color tras la orden del árbitro, ya que era negra como el uniforme que llevaban los camoteros, se tuvo que arrancar hasta los 17 minutos después el encuentro.
Ya en el partido, no hubo muchas jugadas de peligro por parte de los dos equipos, pues fue hasta el inicio del segundo tiempo cuando se abrió el marcador a favor del Puebla con un gol de Gustavo Matías Alustiza al rematar un centro de cabeza dentro del área.
Aunque el marcador pudo aumentar al minuto 66 tras un penal que el árbitro marcó a favor del cuadro camotero, después de un codazo que Alexis Rolín le propinó al “Chavo” Alustiza, este último lo falló mandando su disparo a un lado de la portería.
Con un marcador por la mínima diferencia, el cuadro local se llevó la victoria ante el actual campeón de la liga y copa de Argentina, por lo que la afición que se hizo presente en el estadio se mostró a gusto con el desempeño de su equipo.
Sin mensaje político de MV en reinauguración
En esta ocasión, sin un mensaje por parte del gobernador Rafael Moreno Valle y solo un discreto espectáculo de juego pirotécnicos, los camoteros volvieron a pisar el césped de su casa tras varios meses de jugar como locales en el Estadio Universitario de los Lobos BUAP.
Al acto protocolario también asistió el alcalde Antonio Gali Fayad acompañado de su esposa Dinorah López de Gali, diputados locales, el presidente del Puebla, Jesús López Chargoy y algunos exjugadores de La Franja, quienes solo llegaron y cortaron el listón de dicho evento.
También acudió el presidente de la Federación Mexicana de Fútbol (FMF), Demesio de María y el director de la Comisión Nacional del Deporte y Cultura Física (Conade), Alfredo Castillo.
Cabe mencionar que para la remodelación del Coloso de Maravillas como también se le conoce a la casa de Los Camoteros, el gobierno del estado destinó una inversión de 688 millones de pesos.
Caos en la calzada Zaragoza
En tanto, antes del partido algunas calles fueron cerradas como la Calzada Zaragoza a la altura de la Diagonal Defensores de la República, lo que ocasionó tráfico en esa zona, e incluso algunos automovilistas tuvieron que tomar otra ruta para poder llegar al estadio.
Además de que algunos aficionados quienes iban en unidades de transporte público, prefirieron bajarse de las mismas para irse caminado, pues mencionaban que si no lo hacían no llegarían a tiempo al partido.
Conforme pasaba el tiempo la afluencia de aficionados aumentaba tanto que minutos antes de las 8 de la noche, –hora programada del partido— las entradas principales del estadio se saturaban para poder ingresar al mismo.
Asimismo, algunos accesos hacia las gradas estaban cerrados lo que generaba que los seguidores del Puebla buscarán otros para ingresar. Tales hechos ocasionaron que ya no pidieran los boletos para entrar, además de que tampoco revisarán a las personas.
Llenan el Cuauhtémoc en su reinauguración
Pese a que en días anteriores fue criticada la “mala” organización para la entrega de boletos, el estadio lucio con un lleno total y en su mayoría seguidores del Puebla de la Franja que todo el tiempo estuvo apoyando a su equipo.
No obstante, en las inmediaciones del estadio se encontraban muchos revendedores que trataban de comercializar los boletos para el partido entre 200 y mil pesos, a pesar de que éstos fueron regalados por el gobierno estatal.
El encuentro contó en el medio tiempo con un espectáculo de pirotecnia, la participación de los estudiantes de los Centros Escolares Niños Héroes de Chapultepec y Morelos con sus bandas de música, quienes estuvieron tocando a lo largo del partido.
Fotos: EsImagen
