Por Redacción
Después de 21 años, el gobierno federal reconoció la ejecución de tres zapatistas por el Ejército mexicano en Chiapas; Roberto Campa Cifrán, subsecretario de Derechos Humanos de la Segob, se comprometió a indemnizar a los familiares.
La disculpa pública fue ofrecida este martes a los allegados de Severiano Santiz Gómez, Hermelindo Santiz Gómez y Sebastián López Santiz, quienes –en 1994, en el marco de la irrupción del Ejercito Zapatista de Liberación Nacional (EZLN)– fueron sacado de sus domicilios a golpes, para luego trasladarlos a la sacristía de la iglesia del ejido de Morelia, municipio de Altamirano, donde los torturaron, golpearon y subieron a un vehículo castrense.
Tras ser archivado el caso por la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJ) de Chiapas y la Procuraduría de Justicia Militar, organizaciones civiles presentaron el caso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que emitió en 1997 un informe donde constaba las faltas cometidas por los militares y recomendó al Estado mexicano que investigara el caso, castigara a los responsables e indemnizara a los deudos.
Pasaron 21 años delos hechos y 19 de haberse emitido el informe de la CIDH, para que la Federación reconociera su responsabilidad y, a través la Subsecretaría de Derechos Humanos de la Segob, firmara un acuerdo realizado por la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), la PGR, la Segob y la CIDH.
Fuentes: Sin embargo/Revolución tres punto cero
Foto: Especial
