En Puebla, de enero a septiembre de 2024, seis mujeres al día fueron violentadas física o psicológicamente. En total, durante esos nueve meses, se presentaron mil 761 casos, lo que ubica a la entidad en el noveno lugar nacional, con una diferencia de 43 casos respecto a Sinaloa, que ocupa el décimo puesto.
Con motivo del 25N, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, en Ángulo 7 revisamos las estadísticas de delitos en contra la mujer, publicados por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
En el informe se señala que, a nivel nacional, se registraron 51 mil 873 presuntas víctimas de lesiones dolosas. El Estado de México encabeza la lista con 10 mil 994 casos, seguido por Guanajuato, con seis mil 444.
Respecto a las lesiones culposas, es decir, aquellas producto de negligencia, imprudencia o impericia, a nivel nacional ocurrieron 17 mil 199 casos. En Puebla, se registraron 402, siendo la mayoría de las víctimas mayores de edad.
Otro delito en el que Puebla figura entre las primeras diez entidades es el de violación, con un total de 509 expedientes, mientras que a nivel nacional se reportaron 16 mil 398 casos.
Finalmente, hasta septiembre, el estado contabilizó 39 feminicidios y 74 homicidios dolosos contra mujeres.
25N en Puebla: ¿por qué se conmemora?
Ante este panorama, resulta crucial remarcar la importancia del 25N en Puebla para frenar las diferentes formas de violencia hacia las mujeres. Esta fecha fue instaurada oficialmente en 1999; sin embargo, su conmemoración comenzó en 1961, en honor a las hermanas Mirabal, asesinadas el 25 de noviembre de ese año por orden del dictador dominicano Rafael Leónidas Trujillo.
Trujillo, quien fue presidente de República Dominicana de 1930 a 1938 y de 1942 a 1952, es recordado como parte de las dictaduras instauradas en América Latina durante el período de la Guerra Fría, junto a figuras como Anastasio Somoza García, Augusto Pinochet Ugarte y Jorge Rafael Videla.
Desde entonces, el 25N se conmemora a nivel mundial para visibilizar los diferentes tipos de violencia contra las mujeres. El objetivo es generar conciencia, desde las infancias hasta los adultos, sobre la gravedad de esta problemática.