Imponer aranceles a los productos elaborados en México como adelantó Donald Trump, implicaría un “tiro en el pie” para Estados Unidos, nación que perdería cerca de 400 mil empleos, afirmó el secretario de Economía, Marcelo Ebrard.
En la “mañanera del pueblo”, Ebrard mostró el impacto que tendrá el imponer un arancel del 25 por ciento a los productos que México envía a Estados Unidos, primordialmente a las compañías General Motors, Ford y Stellantis, establecidas en nuestro país y de origen estadounidense.
“Cuando Trump dice: ´vamos a poner impuesto’, en realidad está diciendo vamos a ponerle impuesto a las automotrices de Estados Unidos, porque estas automotrices no sólo exportan desde México vehículos a ese país, también nosotros importamos autopartes de ellas”.
Ebrard comentó que tras el anuncio hecho por Trump de imponer aranceles del 25 por ciento, la consultas realizadas a directivos de las firmas automotrices, las valoraciones es que el costo de los vehículos, en especial los modelos tipo pick up, incrementarían su costo en aproximadamente 3 mil dólares.
El secretario explicó que el 88 por ciento de los vehículos tipo pick up comercializadas en Estados Unidos son importados desde México.
Ebrard adelantó que para hacer frente al anuncio de Trump de imponer los aranceles, México presentará una propuesta para generar una mayor integración comercial en la región norte de América.
Señaló que la propuesta solicitada por la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, considera tres puntos: Estabilidad regional, Prosperidad compartida y Competitividad global.
Del primer punto, Ebrard comentó que la intención es que exista una cooperación estratégica en seguridad, migración y gobernanza.
En la propuesta de “Prosperidad compartida”, el secretario mencionó que el objetivo es crear empleos bien remunerados mediante inversión en infraestructura críticas, en especifico en genera una modernización en las frontera, energías limpias y transporte eficiente.
En el tercer punto de la propuesta, el cual refiere a la Competitividad global, Ebrard apuntó que fragmentar la relación comercial entre Estados Unidos, México y Canadá los debilitará frente a Asia y Europa.
Para evitar este escenario, Ebrard comentó que México promoverá el mantener bajos costos y optimizar las cadenas regionales de suministro.