Actualmente trabaja en la panadería “La Princesa” junto a su compañera Guillermina, quien supervisa el negocio en una de las temporadas más importantes del año. En esta época, la demanda de hojaldras se duplica y llegan a hornear más de mil piezas por día.
Emilio inicia su jornada desde temprano para preparar la primera tanda, mientras el turno de tarde completa la producción diaria. En cada pan, aplica el conocimiento transmitido de generación en generación en su familia.
La hojaldra es un producto especial que exige precisión y tiempo. Entre sus ingredientes destacan la harina, huevo, mantequilla, vainilla, y otros sabores como rompope o chocolate, que dan el toque único de esta panadería.
Emilio y sus colegas siguen cada paso para lograr un pan de calidad. Para Ulises, su compañero, elaborar este pan representa un reto, ya que debe controlar cada detalle para que la hojaldra quede perfecta.
Este proceso lleva más de una hora y media, pero para él, la satisfacción de ver el producto final vale cada minuto.