La empresa Seglo Logistics deberá liquidar a sus 600 trabajadores en Puebla, conforme a la ley, aun cuando termine su contrato con la planta de Volkswagen de México, a partir del 15 de diciembre, señaló líder sindical, Aaron Espinosa López.
Recordó que la proveedora no logró ganar de nueva cuenta la licitación de servicios logísticos al interior de la armadora alemana, ubicada en Cuautlancingo.
Dijo que Seglo Logistics al dejar de prestar servicios, quedará en su lugar Sesé, la cual puede contratar a los trabajadores que serán despedidos.
Dejó en claro que los derechos de los trabajadores de Seglo son irrenunciables, por lo cual espera que se cumpla con las liquidaciones.
Afirmó que hay otras dos opciones para los trabajadores que serán despedidos. La primera que se pasen a la nueva proveedora de Volkswagen, pero sin condiciones de que se les respete su antigüedad o la menos viable que se quieran ir a Mexicali, Hermosillo o San Luis Potosí, donde trabaja Seglo Logistics para otras empresas.
Seglo Logistics pierde 50% de su personal
Indicó que el sindicato tiene mil 200 agremiados, es decir, perderán el 50 por ciento que se encuentra en el territorio poblano.
Algunos trabajadores tenían entre 10 y 15 años de antigüedad, mientras que otros menos de dos años.
Espinosa López sostuvo que el personal de Seglo Logistics está capacitado y a cualquier proveedora interesaría tenerlo.
Sin embargo, dijo, las condiciones laborales no serán las mismas en la empresa que trabajará para Volkswagen, “pues en el sector de proveeduría teníamos los mejores salarios y prestaciones”.
Admitió que es difícil que algunos de los sindicalizados en Puebla se quieran mudar a otros estados para no perder su antigüedad.
Espinosa López dijo que los próximos despedidos, a partir del 15 de diciembre, deben estar unidos para exigir que reciban su liquidación conforme a derecho.
A pesar de la postura del sindicato de Seglo Logistics, algunos trabajadores comentaron a este medio que ha comenzado la presión. A los sindicalizados se les obliga a que se queden a un segundo turno o les piden que firmen su liquidación con la promesa de que los contratarán en la otra empresa.