Durante muchos años se ha carecido de candidaturas para pueblos indígenas. Se careció de una representación de los pueblos indígenas real, que los tomara en cuenta para buscar su desarrollo sin arriesgar sus usos y costumbres.
Con la llegada del presidente Andrés Manuel López Obrador, los pueblos indígenas vieron un respiro a esos años en los que habían quedado en el olvido.
Acciones que van desde pedirles perdón por los agravios de la conquista, hasta reivindicarlos como parte importante de la historia, es algo que hemos visto.
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Sin embargo, en términos de representación directa pues también había sido un logró que Morena logre candidatos indígenas. El hecho de que asignara candidaturas para lo que le llaman “las minorías” como pueblo indígenas, discapacitadas y comunidades lgbtttiq+, habla bien de su política.
El reto es realmente cuando se lleva a la práctica esos ideales. Pues se tiene el riesgo de hacer a un lado estos grupos, por priorizar acuerdos internos. En ese tenor, es algo que le está haciendo falta a Morena en Puebla.
Alfonso Bermúdez Díaz, representante del partido guinda ante el Instituto Electoral del Estado de Puebla (IEE) justificó el hecho de que en Puebla no se otorgó este tipo de candidaturas, porque “a nivel nacional ya se cubrió la cuota”.
¿Se trata de cubrir la cuota y no de ser garantes de la unidad?, ¿Se trata de hacer un lado lo ya avanzado por el presidente en torno a los Pueblos indígenas?, ¿Se trata, pues, de quitarles este derecho?
Morena Puebla debe reflexionar sobre el tema y ahorita, en medio de este reacomodo por las candidaturas, priorizar a los pueblos.
