El gobierno estatal y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) firmaron un convenio para atender los inmuebles pendientes de reconstrucción tras los sismos del 2017; hasta octubre de 2022, se habían culminado obras en 414 de los 621 dañados.
Así lo dio conocer este lunes, a través de sus redes sociales, el gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina, tras reunirse con el director general del instituto, Diego Prieto Hernández, en Casa Aguayo.
El titular del Poder Ejecutivo estatal señaló que igual se acordó que para este año se harán parte de las obras que se tienen pendientes, aunque no precisó cuántas ni el monto que se destinará.
“Un gusto recibir en Puebla a Diego Prieto, director del INAH, con quien firmamos un convenio para dar atención al patrimonio cultural afectado por los sismos de 2017. Conversamos sobre las obras que habrán de realizarse durante este 2023”, escribió en su cuenta de Twitter.
El mandatario comentó que la conservación del patrimonio histórico es un asunto que el gobierno del estado comparte con el instituto, por lo que se tienen que trabajar en conjunto para su restauración.
“Continuaremos con acciones coordinadas que nos permitan realizar todos los trabajos de restauración que sean necesarios”, publicó en un segundo tuit, seguido del hashtag #PorPuebla.
En octubre iban 414 templos reparados
Hasta octubre pasado, el delegado del Centro INAH Puebla, Manuel Villarruel Vázquez, informó que tenía un avance físico de la reconstrucción del 65 por ciento de los 621 templos afectados por los sismos de hace casi 6 años, lo que representa a 414.
Esto significa que faltaban hasta ese entonces 207 inmuebles históricos y se prevé que en 2023 se llegue al 95 por ciento del total, es decir, 590.
El funcionario igual dijo que para este año están programadas 26 acciones, entre ellas en Atzala y Huaquechula para los proyectos ejecutivos, ya que varios de los inmuebles sufrieron daños catalogados como severos, lo que implica que se tenga que hacer labores de protección, investigación y evaluación para las obras.
De igual forma, el delegado comentó que, aunque hay templos como los de Atzala y Chila de la Sal, así como los exconventos de Nuestra Señora de la Asunción, en Tochimilco, y el de San Martín de Tours, en Huaquechula que sufrieron daños graves, todos serán atendidos antes de que acabe el sexenio.
