El rector de la Universidad Anáhuac, José Mata Temoltzin, señaló que los hechos en los que se han visto involucrados alumnos de la escuela no afectan la imagen de la institución, pues no son responsables del actuar de ellos y solo “son el último eslabón” de la formación.
En entrevista, previo al informe del gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina, el académico explicó que esta situación es algo que se debe reflexionar más en las familias, pues no tiene que ver con los centros educativos en su totalidad, ya que éstos son la última estancia en el proceso.
Dijo que la mayoría del tiempo y formación se da en las familias, con las personas que conviven y los espacios en los que se relacionan, por lo que es en lo que se tiene que poner atención, pues lo que se vea en redes sociales o los discursos que escuchen puede dar pie a esto.
“Evidentemente no afecta la imagen, porque como cualquiera de ustedes puede evaluar, es un tema de la sociedad, porque si pueden ver hay noticias positivas de la comunidad, que es la institución con más de 4 mil integrantes, por lo que una o dos que hagan eso no representa lo que es la Anáhuac”, expresó.
Y es que, puso de ejemplo, la universidad de educación privada fue la “única” de Puebla que llevó voluntarios en las horas críticas que pasaron los pobladores de Acapulco, por el paso del huracán Otis, en donde se entregaron víveres en más de 40 toneladas.
Manifestó que “no lo hacen para salir en las noticias”, sino como una labor social que ha mantenido la institución por varios años.
En ese tenor, Mata Temoltzin indicó que en la institución tienen programas para concientizar a los jóvenes sobre la no violencia, siendo uno ellos que se puso en marcha con el gobierno estatal en el que se hace una reflexión sobre las consecuencias que ello implica.
Conducta no es responsabilidad de la institución
“Siendo el último eslabón en muchas ocasiones somos los únicos que hacemos un esfuerzo por formar a un joven, el tratar de abrirle su horizonte, abrirle su psicología, tratar de proponer que se haga preguntas sobre qué tipo de persona quiere ser y es algo en lo que debemos seguir trabajando”, remarcó.
Sin embargo, hizo énfasis en que no pueden ser responsables de lo que una persona vive durante los años de formación fuera de la institución, por lo que se tiene que equilibrar “lo espectacular de la información” sobre lo que se hace al interior.
Ante las críticas que hubo de que en lugar de expulsarlos tendrían que haber trabajado con ellos para evitar conductas violentas, el rector sostuvo que es complejo cuando se tiene un país en el que “cuesta aplicar la ley”.
Es de mencionar que el primer caso que se dio fue a inicios de septiembre cuando siete jóvenes de la Anáhuac agredieron a Ernesto Calderón, en la zona de antros de Angelópolis, que derivó en afectaciones a su ojo y otras lesiones, por lo que hay tres de ellos vinculados a proceso.
Mientras que el más reciente fue a finales de noviembre cuando Patricio N, de 17 años y estudiante de la preparatoria Anáhuac, agredió a un vigilante del fraccionamiento Lomas de Angelópolis porque le pidió que se pasara al carril de visitas porque su tack no servía para ingresar.
