Tras ocho meses del cierre de la Universidad de las Américas Puebla (Udlap), estudiantes y docentes regresaron a clases presenciales con la implementación de protocolos sanitarios y aún con trabajos de mantenimiento.
En su primer día de clases presenciales, se presentaron alrededor de 6 mil estudiantes de una matrícula de 8 mil 300 estudiantes, lo que representa un 72 por ciento de alumnos, ante un modelo educativo híbrido.
La rectora Cecilia Anaya Berríos explicó, en entrevista con los medios de comunicación, que al primer día de clases presenciales solo fueron habilitados 97 de los más de 300 salones o laboratorios.
Precisó que continúan las labores de limpieza y mantenimiento de las instalaciones a marchas forzadas, luego de que fueron entregadas el pasado jueves con evidente descuido.
Anaya Berríos sostuvo que los espacios de la universidad se habilitarán de forma gradual, ya que se tiene prioridad a las aulas o espacios destinados a la impartición de clases y después seguirán otros como la biblioteca y áreas deportivas.
Mientras que las puertas del campus han sido abiertas a los estudiantes universitarios, el proceso jurídico entre los patronatos y la Fundación Mary Street Jenkins sigue en pie y las órdenes de aprehensión contra miembros de la familia Jenkins de Landa se mantienen vigentes por supuesto desvío de recursos.
Por Fernando Cortijo
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