Luego del acuerdo de los ambulantes con el ayuntamiento de Puebla para que no se instalaran en el Centro Histórico durante el fin de semana, este lunes, los comerciantes regresaron a las calles, aunque en menor medida, pues se vieron alrededor de 500.
Esto se pudo notar en un recorrido realizado por este medio en calles como la 8, 10 y 14 Poniente, así como en la 3 y 5 Norte, donde desde el viernes y hasta el domingo no hubo presencia del comercio informal, por un acuerdo entre la nueva administración del alcalde Eduardo Rivera Pérez y los ambulantes.
A diferencia de las mencionadas calles, no se observó la presencia de ambulantes sobre la 5 de Mayo, que es la más transitada en el Centro Histórico, siendo una de las pocas que se encontraba así, aunque hubo elementos de Vía Pública en esta vialidad.
Entre las organizaciones que se instalaron en esta zona fueron Fuerza 2000 y la 11 de Marzo, las que más comerciantes aglutinan en esta parte del primer cuadro de la ciudad.
Los vendedores ambulantes estaban instalados de ambos lados de la calle, como en la 8 y 10 Poniente, lo que generó que el espacio se viera reducido para el tránsito de los vehículos, así como para las personas, pues algunos igual ocupaban la banqueta.
Puestos de antojitos, accesorios para teléfonos celulares; memorias; audífonos; ropa como pantalones, playeras y chamarras, tenis; pilas; bocinas; accesorios de belleza; mochilas; cargadores y hasta aretes, son algunos de los productos que más se pudieron observar.
10 Poniente y 3 Norte, con más ambulantes
Mientras, del lado de la 3 y 5 Norte se pudo ver que hay puestos de cubrebocas, botanas, tines, dulces, comida, frutas y verduras, estos últimos más cerca del mercado 5 de Mayo, por lo que ahora los vehículos y las personas transitan lento por lo reducido del espacio de ambas calles.
El viernes pasado, el titular de la Secretaría de Gobernación Municipal (Segom), Jorge Cruz Lepe, en entrevista dijo que la administración saliente heredó 5 mil ambulantes en el Centro Histórico, por lo que este lunes habría una mesa de diálogo para llegar a acuerdos con ellos, siendo un buen paso que cedieran a no instalarse viernes, sábado y domingo.
Sobre el tema, el domingo, el alcalde Eduardo Rivera Pérez reconoció el comercio informal tiene derecho a trabajar, pero sin afectar a los comercios establecidos.
