Al omitir pronunciarse por la agresión que vivieron familiares de Zyanya Estefanía Figueroa Becerril el pasado viernes por parte de la FGE, el gobernador Miguel Barbosa Huerta afirmó que dicho organismo “es profesional”; se interpondrán hasta 12 denuncias contra la institución.
Al ser cuestionado sobre la agresión que vivieron familiares de Zyanyia, activistas y medios de comunicación a manos de la Fiscalía General del Estado (FGE), el gobernador poblano afirmó en su conferencia de prensa matutina que no está informado del caso, pero que el organismo autónomo llegará a fondo en sus investigaciones desde la ruta de feminicidio, que exige la familia de la joven médica fallecida el 15 de mayo de 2018.
Sin embargo, señaló que “hay que hacer conciencia de que las autoridades actúan conforme a sus atribuciones” y solicitó a los ciudadanos que se sientan agraviados por el desempeño de la FGE a “dirigirse con respeto” para encontrar una solución.
Asimismo, afirmó que en la FGE, a cargo de Gilberto Higuera Bernal, se van a atender las peticiones de los familiares de la víctima de indagar el caso con una visión de feminicidio, por lo que dijo que “va a estar al pendiente”.
Por su parte, el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF) informó el sábado que se interpusieron hasta 12 denuncias penales en contra de la FGE por la agresión con gas lacrimógeno y golpes hacia manifestantes el pasado viernes.
Era manifestación pacífica
El organismo señaló que se trataba de una manifestación pacífica, sin embargo, en cuanto personal de la FGE los vio comenzó a agredir a los asistentes, incluso a una activista adulta mayor.
Afirmó que los agentes ya fueron identificados y se certificó que también usaron macanas y una pistola de tiros eléctricos para someter a los asistentes a la marcha.
Por los hechos, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y el Alto Comisionado de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) atraerán el caso en contra de la fiscalía.
Es necesario señalar que Zyanya falleció en 2018 y la FGE determinó que se trató de un suicidio, sin embargo, familiares afirman que el caso tiene irregularidades, pues la joven no tenía pensamientos suicidas y la carta que dejó no tenía el lenguaje que ella usaba.
Además, de acuerdo con peritos, las marcas halladas en su cuello no correspondían a la suspensión de su cuerpo, que fue descubierto colgado de un tubo, por lo que se trataría de un feminicidio.
Por otra parte, de 70 indicios que había en la escena del supuesto suicidio, entre jeringas, sangre, cuchillo, tijeras, medicamentos y otros, solo se recabaron cuatro, además de que no se verificó si Zyanya tenía signos de violencia sexual, sin embargo, las autoridades iban a entregar la casa donde la joven vivía a sus dueños pese a que no se ha llevado a cabo la reconstrucción de los hechos.
