Ante mercados marginalistas que dan “rentabilidad a los generadores privados y ningún beneficio a los usuarios”, así como para evitar alzas excesivas en los precios como pasa en España, la iniciativa de reforma energética busca dar seguridad en este servicio y tarifas justas.
Así lo señaló la Comisión Federal de Electricidad (CFE), misma que explicó que tras la reforma eléctrica de 2013, la última central de generación en entregar energía eléctrica al sistema es la que determina el precio a pagar por la energía a todas las demás centrales que hayan generado, independientemente del precio ofertado por cada generador o la fuente de energía.
Por lo cual, el orden del despacho de las centrales de generación se realiza en función de los costos variables determinados generalmente por el precio de combustibles. Por ello, las primeras centrales de generación en ser despachadas son las energías renovables que presentan un costo variable cero.
Sin embargo, estas centrales de energías renovables reciben como pago el precio de la oferta más alta del mercado “la central más cara”, sin importar que sean “baratas”. Por ello, los usuarios de tarifa regulada se ven directamente afectados por las variaciones en el precio del mercado eléctrico.
Aunque el presidente Andrés Manuel López Obrador estableció una política de soberanía energética para que las tarifas no incrementen más allá de la inflación, los estragos del mercado marginalista se vieron con el mega apagón del 28 de diciembre de 2020 que afectó a 10 millones de usuarios.
Lo anterior como consecuencia de la dependencia del suministro de gas de Texas, cuyo gobierno determinó cortar el abasto de este combustible a México como medida precautoria ante el congelamiento de gasoductos por las tormentas de nieve en el invierno pasado.
Por ello, la iniciativa para reformar los artículos 25, 27 y 28 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos buscará garantizar la seguridad energética y tarifas eléctricas justas, mediante la creación de un mercado eléctrico beneficioso para las tarifas que paga la ciudadanía y no para las ganancias de los generadores de energía, como sucede en España.
El efecto de los mercados marginalistas en España
Según datos del operador de mercado eléctrico de España (OMIE), la evolución en los precios de electricidad aumentaron 447 por ciento, ya que en octubre de 2020 el precio fue de 36.59 euros (€)/MWh, aproximadamente 867.10 pesos, mientras que para octubre de 2021 fue de 200.6 euros (€)/MWh, aproximadamente 4 mil 740.96 pesos.
El Banco de España determinó que el incremento en los precios se debe en un 70 por ciento a la elevación del precio del gas y al encarecimiento de los derechos de emisión de CO2. Aunque en México el pico más alto en febrero de 2021 en los precios de la electricidad se debió a los altos costos del gas texano, no significó un daño a las usuarias y usuarios mexicanos.
RE: LPR
Editado por Paola Macuitl Gallardo
