El presidente, Andrés Manuel López Obrador, pidió al gobierno de la Ciudad de México que investigue si la policía capitalina usó gas lacrimógeno o pimienta en contra de manifestantes el pasado 8 de marzo; la valla en Palacio Nacional iba a estar una semana “por respeto”.
En su conferencia de prensa matutina, donde una reportera refirió que integrantes de la Brigada Marabunta tenían pruebas del uso de algún tipo de gas por parte de la policía, el mandatario contestó que debe ser Claudia Sheinbaum Pardo, jefe de gobierno de la Ciudad de México, quien lo aclare.
Detalló que el uso de dispositivos para neutralizar drones fue porque “quienes están detrás de la violencia” incluso pudieron tirar una bomba en la sede de su gobierno y criticó que se haya mencionado que eran “francotiradores”.
Informó que en esta ocasión las colectivas no quisieron mantener un diálogo con el gobierno de Sheinbaum Pardo, lo cual siempre ocurría por cuestiones de logística de las marchas.
Esperaba que se respetara valla
Explicó que se consideró que la valla en Palacio Nacional permaneciera al menos una semana “por respeto” luego de que mujeres pintaran los nombres de víctimas de feminicidios, lo cual se le hizo “creativo”
Sin embargo, dijo, el “muro”, que se convirtió en una especie de memorial, no fue respetado y una parte del mismo fue destruido, por manifestantes el 8 de marzo.
El mandatario pidió que no haya ninguna sanción contra quienes “usaron violencia” en la marcha del día de la mujer, ya que “el mayor castigo es la condena pública”, pues dichos actos son la “expresión más burda del machismo”.
Consideró que sin violencia, el zócalo se podía haber llenado, pues la lucha contra los feminicidios es muy sentida y justa.
Asimismo, López Obrador recordó que cuando se “impuso” a Enrique Peña Nieto se colocaron vallas alrededor del Congreso de la Unión y hubo represión, además de que existen distintas formas de manifestarse, pues siempre “hay extremistas”.
Ante la pregunta de la prensa sobre si haría un llamado a los gobernadores y fiscalías para que mejoren la impartición de justicia en casos de feminicidios, el presidente afirmó que la Secretaría de Gobernación mantiene una comunicación constante con los mismos, con el objetivo de que “si es asesinada una mujer no sea un homicidio más”, sino que se le clasifique como feminicidio y se castigue, para que no haya impunidad.
Además, refirió que se tiene un proceso de formación a ministerios públicos y en las fiscalías, donde participan más féminas, “hay todo un trabajo que se hace diariamente”.