El gobierno federal analiza cinco opciones para vender el avión presidencial, entre las que está hacer una rifa con seis millones de “cachitos” de la Lotería Nacional con un costo, de cada boleto, de 500 pesos, señaló el presidente Andrés Manuel López Obrador.
En la conferencia matutina, mencionó que el jueves, dedicó casi todo el día para pensar en el futuro de la nave; “me tiene que ayudar, como siempre, ustedes, que son los que transmiten la información y la gente, que ayuda mucho”, dijo a los medios de comunicación.
Una opción es, continuó, es que haya un solo comprador, lo que se inició desde hace un año, con el acompañamiento de la ONU; recordó que el avalúo es de 130 millones de dólares y encontrados dos compradores en Estados Unidos, pero “no se animaban”.
Al día siguiente de que regresó a México el avión, sostuvo, hubo un ofrecimiento de 125 millones de dólares que no aceptó la Federación porque no pueden darlo por debajo del precio.
La segunda alternativa, agregó, es un intercambio con el gobierno de Estados Unidos de la nave por equipos médicos: ambulancias, tomógrafos, equipos de rayos X y demás necesidades de hospitales, que en conjunto sumen los 130 millones de dólares.
En tercer lugar, dijo, es la venta a empresas nacionales en 12 partes, ante lo cual hay ya dos ofrecimientos, aunque reconoció que “no es fácil” porque si el presidente no lo va a usar, “menos una firma” y aprovechó el momento para lamentar, nuevamente, que la adquisición del Boening 787
puesto que “ya ni los más ricos del mundo y extravagantes tienen estos aviones”, sino que los rentan.
Rentarlo por hora
Por ello, como cuarta opción está que se rente por hora, es decir que la Fuerza Aérea lo administrara, cobrando por hora; si bien no dio una cifra, ejemplificó que en Asia el costo es de 70 mil dólares, lo cual calificó de “excesivo” por lo que en México el monto sería menor.
“La operación, si lo tiene la Fuerza Aérea, para volarlo resulta a 15 mil dólares la hora la operación; eso es el costo, pero ahí habría que agregar el pago que se tiene que ir haciendo por el deterioro del avión o tener el avión”, lanzó.
La quita y más polémica elección sería rifarlo, para lo que estaría a cargo la Lotería Nacional: serían seis millones de números, “cachitos”, de a 500 pesos; al ganador se le daría el avión, ya incluido un servicio de operación de dos o un año, además de que se establecerían reglas porque “sería muy lamentable” que quien se lo quede lo malbaratara.
Consideró que los empresarios podrían ayudar con la venta de los boletos, pero resaltó que sus primeras opciones son que en Estados Unidos se animen a adquirirlo o que el gobierno de dicho país acepte “el trueque”.
