La alcaldesa Claudia Rivera Vivanco pidió, nuevamente, una reunión con el gobernador Miguel Barbosa Huerta para combatir la pandemia del Covid-19 en la capital de Puebla, al reconocer que las personas siguen saliendo y el comercio informal no se redujo en su totalidad.
En rueda de prensa del Comité de Información Puebla, manifestó que desde que se emitió el decreto por parte del gobierno estatal, el pasado domingo, se puso en marcha el diálogo con los líderes ambulantes del primer cuadro de la ciudad, aunque no todos respondieron de forma positiva.
Ante esto, dijo, es obligatorio que ambos órdenes de gobiernos pongan en marcha estrategias para disminuir el aumento de contagios de coronavirus que se han visto en los últimos días.
Manifestó que “es necesario generar un acuerdo pacífico por la salud”, por lo que le pidió al titular de la Secretaría de Gobernación Municipal (Segom), René Sánchez Galindo, que se reúna con los líderes ambulantes para establecer términos en común.
La edil señaló que “se sigue viendo con mucha preocupación” que la respuesta por parte de los ciudadanos en términos generales, incluyendo el comercio fijo y el que se instala en vía pública, no es la que se esperaba, por lo que es necesario reiterar que Puebla se encuentra en alerta máxima de contagios y que solo la disciplina social puede hacer la diferencia.
“Pido al gobernador Miguel Barbosa Huerta abrir un espacio de diálogos, de acuerdos en beneficio de los poblanos, que se den reuniones manera cordial, respetuosa, institucional a fin de hacer una coordinación para la definición de estrategias técnicas y operativas para el cumplimiento del decreto”, pronunció.
Ambulantes y comercios sin cumplir decreto
En su turno, Sánchez Galindo afirmó que hubo una reducción de tianguis, pues dejaron de instalarse cinco que acataron las medidas, así como hubo disminución del 84 por ciento de los puestos en estas zonas, aunque en el Centro Histórico tanto el comercio informal como el establecido siguen desacatando las medidas.
Explicó que, de acuerdo con el monitoreo que ese hizo, se redujo solo 41 por ciento de los ambulantes en las calles del primer cuadro de la ciudad, mientras que, en el caso de los comercios formales, de los 400 que se revisaron, solo el 32 por ciento cumplió con no abrir, que son 128.
El funcionario municipal detectó que los dueños de los negocios lo hacen eso es porque, aunque bajan la cortina, dejan una puerta abierta, sacan a sus trabajadores a la calle para que jalen a las personas y puedan hacer la venta al interior del inmueble.
Por otra parte, comentó que con los 25 operativos que se hicieron, se retiró al mismo número de puesto, de los que 17 fueron a través del exhorto y los ambulantes accedieron a retirarse, en cinco se aseguró la mercancía y tres fueron detenciones al negarse a quitarse.
Finalmente, dijo que se han dado siete clausuras al mismo número de establecimientos por incumplir con el decreto, las cuales fueron en colonias El Águila, Santa Cruz Los Ángeles, Belisario Domínguez y Volcanes.
