Luego de Fulle Hen afirmó que el ayuntamiento de Puebla le especificó que los 12 ventiladores que le había vendido fueran reacondicionados, porque los nuevos tomarían más tiempo, el gobierno municipal negó que los haya pedido así y señaló que el contrato ya fue rescindido.
Lo anterior, a través de un comunicado en respuesta al posicionamiento de la empresa, donde la Comuna aseguró que “nunca solicitó a la empresa Fulle Hen S.A. de C.V. los 12 respiradores médicos como equipos reacondicionados, tal y como se constata en el contrato con la empresa proveedora”.
Refirió que sólo el día de la entrega de los equipos en el Hospital de Traumatología y Ortopedia (18 de mayo) la situación de que eran “ensamblados” fue expuesta a elementos del ayuntamiento y de la Secretaría de Salud del estado.
Como “los ventiladores no cumplían las expectativas, se solicitó al proveedor retirarlos (del hospital), a lo que la empresa accedió”.
El ayuntamiento agregó que, en el proceso de rescisión de contrato, “la empresa proveedora acepta que las expectativas no son compatibles con las requeridas”.
Cabe recordar que, el pasado viernes, la Comuna se lavó las manos al asegurar que no fue su culpa la mala entrega de ventiladores para Covid-19, sino de la empresa, ya que en el contrato venían las especificaciones que el gobierno estatal dio como condición para recibirlos.
Por su parte, Fulle Hen sostuvo que los ventiladores cuentan con permisos de Cofepris y pasaron evaluaciones.
