De 2007 al cierre de 2019, sumaron más de mil 200 poblanas que viajaron a la Ciudad de México para realizarse un aborto, lo que demuestra que el Congreso local tiene que entrarle a la discusión sin más largas, pues acudir a la SCJN para despenalizarlo sería un proceso largo.
Así lo indicó Natalí Hernández Arias, del Centro de Análisis, Formación e Iniciativa Social (Cafis), quien consideró que no es tan viable llegar a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para que se declare inconstitucional el artículo que sigue penalizando a las mujeres por del derecho de decidir sobre sus cuerpos.
Luego de que la secretaria de Igualdad Sustantiva, Mónica Díaz de Rivera, advirtió que las reformas que hizo el Congreso que no contemplaron al aborto darán pie a impugnaciones, la activista resaltó que eso llevaría tiempo, como ocurrió para que el máximo tribunal se pronunciara a favor de los matrimonio igualitarios, proceso que llevó un año desde que la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CDNH) pidió que se declararan inconstitucionales.
En entrevista con Ángulo 7, explicó que con la despenalización del aborto ocurriría algo igual, es decir que el tema volverá a caer en manos del Congreso para que sea legalmente aceptado sin tener que recurrir a amparos.
Por ello, una vez más conminó a los diputados a tomar la vía de discusión y cumplan con abordar el tema, pues el presidente de la Junta de Gobierno, Gabriel Biestro Medinilla, afirmó que este 2020 se contemplará en la agenda.
Pese a 4 causales en Puebla, hay trabas
Explicó que, aunque los legisladores se comprometieron a realizar foros para discutir el tema, sólo una diputada panista, que está en contra de la práctica, organizó uno, mientras que las organizaciones realizaron dos, a los que muy pocos diputados acudieron, pese a ser invitados, lo cual consideró un desdén.
Sin dar nombres, resaltó que las diputadas que se han dicho estar a favor del aborto hasta la semana 12 de gestación siguen sin demostrarlo.
Hernández Arias resaltó la importancia de agilizar la discusión porque desde 2007, cuando se despenalizó el aborto en la Ciudad de México, al corte de 2019, más de mil 200 poblanas tuvieron que ir al vecino estado, porque en Puebla se sigue criminalizando.
Si bien en Puebla hay cuatro causales por las que no se penaliza la interrupción del embarazo, en muchos casos hay dificultades administrativas y las organizaciones canalizan los casos a la Ciudad de México, lo cual habla de que en la entidad poblana las mujeres necesitan que el servicio sea legal, seguro y gratuito.
Ejemplificó el caso de una niña de 13 años, a quien dieron acompañamiento por tener un embarazo producto de violación de su padre; al ser una de las causales permitidas, se tenía que autorizar en Puebla, sin embargo, el proceso tardaba, por lo que, con recursos de colectivos, se movieron de estado, pues la menor estaba en un periodo delicado.
Por lo anterior, solicitó al Congreso, de mayoría de Morena y que se ha comprometido a legislar, pongan sobre la mesa la discusión, ya que hay dos iniciativas en ese sentido que necesitan ser destrabadas.