Por segunda ocasión, los familiares de Gabriela Sánchez Martínez, quien fue hallada muerta el pasado 5 de mayo en la colonia Nueva San Salvador, exigieron a la FGE que detenga al presunto asesino de su hija y que el caso sea tratado como feminicidio.
La mañana de este domingo, los manifestantes pegaron carteles en la fachada de la Fiscalía General del Estado (FGE) con consignas que pedían justicia para la joven de 27 años, y pidieron que no le dieran “carpetazo” al crimen catalogándolo como suicidio.
La madre de la víctima, Julia Martínez Pérez, explicó que el presunto responsable, Alberto Carranza Rodríguez, maltrataba a su hija, la prostituía, la drogaba, la sacaba de su trabajo y la abandonaba en la carretera, ante lo cual la víctima intentó interponer denuncias por violencia intrafamiliar, pero fue rechazada cuatro veces.
Reiteró que Gabriela no se suicidó colgándose de un árbol atrás de su casa, pues el cuerpo presentaba golpes, le cortaron el cabello y le pusieron ropa de hombre, razón por la cual en un inicio se le identificó como un varón e incluso el supuesto asesino mintió en el Servicio Médico Forense (Semefo) diciendo que no era su pareja.
Responsable sigue libre, acusan
Resaltó que el hombre, que trabaja en una empresa de grúas, desde hace año y medio la llamaba para amenazarla de no meterse en su vida o de lo contrario encontraría muerta a la víctima, además de que ahora pide que le regresen a la hija de Gabriela, aunque no es suya.
Aunado a ello, acusó que Karla Soledad Ortega Valencia, trabajadora de la FGE, fue el 27 de mayo a la casa de una vecina para pedirle que firmara una denuncia en la que aseguraba que Sánchez Martínez era vagabunda, drogadicta y no quería dejar a su pareja sentimental.
Tras lo anterior, la vecina se negó debido a que conocía la situación y le informó a la madre de la víctima, quien aseveró que la funcionaria continúo visitando a otras personas.
Martínez Pérez pidió, como el pasado 16 de junio, que se haga justicia para que el responsable de la muerte de su hija ya no siga libre en la impunidad.
