Luego de que Rosario Robles Berlanga, extitular de Sedatu presa por el caso La Estafa Maestra, lo acusara de venganza política, el presidente Andrés Manuel López Obrador le respondió que la persecución y fabricación de delitos pasaron “al basurero de la historia”.
Lo anterior, este viernes durante su conferencia de prensa matutina, donde remarcó que, con la creación de la Fiscalía General de la República (FGR), el Ejecutivo dejó de ser el jefe del fiscal y las imputaciones sólo corresponden a este organismo, además de que las medidas aplicadas a la acusada son decisión del poder judicial.
En este sentido, descartó intervenir de forma alguna en el caso de Robles Berlanga, quien, a través de una carta difundida el jueves en medios de comunicación, también le exigió un juicio justo para demostrar su inocencia.
Asimismo, el mandatario refirió que, en gobiernos pasados, a “los adversarios, que consideraban enemigos, los destruían fabricándoles delitos, por lo que “lamentó” que la exsecretaria de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) alegue que la administración que él encabeza hace lo mismo.
“A nadie se le persigue, a nadie se le fabrican delitos. Eso ya pasó al basurero de la historia”, sentenció ante la pregunta de la prensa sobre si hay una confabulación para mantener a Robles Berlanga en la cárcel.
Respecto a que la Secretaría de la Función Pública (SFP) inhabilitó a Robles Berlanga por 10 años para ocupar cargos en el servicio público federal, López Obrador señaló que se trata de un trámite administrativo, no judicial.
