Más de 40 comunidades de Ixtacamaxtitlán y la cuenca del río Apulco entregaron al titular de Semarnat, Víctor Toledo Manzur, 3 mil 500 firmas para exigir que no autorice a la canadiense Almaden Minerals la Manifestación de Impacto ambiental (MIA) para extraer oro y plata.
A tres meses y medio de que se realizó la reunión de información pública y en vísperas de que la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) decida si dará luz verde a la empresa Minera Gorrión (filial de la canadiense), activistas acudieron a la Ciudad de México para entregar las signas contenidas en más de 40 actas de asamblea de comunidades de Ixcatacamaxtitlán.
El documento también está firmado por representantes de 27 municipios de la Sierra Norte de Puebla, en el que rechazan el proyecto de minería a cielo abierto, al recordar que, desde 2014, se organizaron para defender sus derechos humanos y el territorio, a través de caravanas y marchas.
Argumentaron que, por su relevancia biológica y cultural, declararon a la región libre de proyectos extractivos y señalaron que la filial de Almaden Minerals no cuenta con derechos sobre las concesiones con las cuales sustenta su MIA, debido al juicio de amparo 445/2015, que el ejido de Tecoltemi interpuso ante el Juzgado Segundo de Distrito en Materia Administrativa del Estado de Puebla.
De acuerdo con la organización Poder, los opositores mencionaron que el Estado Mexicano, antes de haber otorgado las concesiones mineras y los resolutivos de los informes preventivos, debió haber obtenido el consentimiento del pueblo indígena nahua que habita el municipio de Ixtacamaxtitlán de conformidad con los estándares internacionales.
La canadiense “manipula”
Desde 2017, resaltaron, denunciaron, con base en los resultados de la Evaluación de Impacto en Derechos Humanos (EIDH), los daños que la etapa de exploración del Proyecto Ixtaca causaron al derecho humano al agua, la salud y un medio ambiente sano y los potenciales riesgos que la explotación representa para ese territorio.
Recordaron que el 25 de junio de 2019, en la reunión pública sobre el Proyecto Minero Ixtaca, organizaciones sociales, investigadoras y académicos presentaron a Semarnat 17 documentos técnicos con observaciones a la MIA que demuestran que la explotación minera amenaza la biodiversidad de la región y que la empresa no informó los impactos ambientales reales que ocasionará el proyecto.
Denunciaron que la canadiense se conduce con un discurso “manipulador” a la población pues asegura que la construcción de la mina empezará en 2020, además de que ofrece empleos.
Acusaron también hostigamiento por parte de la firma contra defensores en la localidad de Santa María; “Secretario Toledo, en sus manos está detener la devastación ambiental en nuestro país”, pronunciaron.
