Entre música, trajes típicos de las regiones de Puebla, danzas de las distintas etnias y culturas del estado, fue como se vivió la 54 edición del Huey Atlixcáyotl este domingo, el cual se realizó bajo la lluvia que, por primera vez, cayó durante su realización.
Pese a esto, el agua no impidió que decenas de personas subieran por el empedrado que da a la explanada del cerro de San Miguel Arcángel en Atlixco, para presenciar el festival que, como cada año, reúne a representantes de los pueblos originarios y que expresa que está región de Puebla está de fiesta.
Algunos con sombrilla, otros con impermeables, sombreros y gorras para no mojarse tanto, visitantes y habitantes de la demarcación se dieron cita desde temprana hora para no perder detalle del Huey Atlixcáyotl, celebración que nació en 1965 y con el paso del tiempo se convirtió en una fiesta estatal, y por lo que en 1996 fue declarado Patrimonio Cultural del estado.
Fue alrededor de las 10 y media cuando comenzó la celebración con la coronación de la reina Zochixihuatl y sus Xochipilmes por parte del gobernador Miguel Barbosa Huerta, quien también recibió el bastón de mando de los pueblos indígenas.
Posteriormente, dio inicio la presentación de las 16 danzas de las diferentes regiones de Puebla, donde se vinculan, a través del colorido de sus trajes, la cultura de las etnias con la mezcla de las costumbres católicas luego del proceso de colonización por parte de los españoles.
Dichas danzas fueron los bailes del convite y el calabaceado, los migueles, los huehuetones, el jarabe, ajalpense, las tocotinas, los coreos, los axacales, los santiagueros, la boda indígena, los apaches, los pilolos y huizos, los negros y gracejos, el baile de la flor, la de los tecuanes, los voladores de Xochitlán y la pluma.
Danzas muestran identidad de pueblos indígenas
Esta celebración, que se realiza el último domingo de septiembre en la ladera norte del cerro, muestra la danza, música, indumentaria y producción artesanal de los grupos originarios de la entidad que provienen de diversas regiones etnogeográficas como son Valles Centrales, Volcanes, Tierra caliente, Mixteca, Popolpca, Cañada, Sierra Norte, Huasteca, Llanos, Costera, Sierra y Valle de Tehuacán.
Además de que refleja parte de las culturas de los pueblos indígenas como nahuas, otomíes, totonacos, tepehuas, popolocas, mixtecos, mazatecos y cada vez más a la creciente población mestiza.
En la edición de este año, el estado de Oaxaca fue la danza invitada con el baile “La Pluma” la cual está inspirada en un ritual precortesiano que evoca el triunfo del pueblo mixteco sobre el zapoteca.
De acuerdo con las autoridades municipales, se estima una afluencia de 10 mil personas, cifra similar a la de otros años, pues las inclemencias del clima es un factor para algunos decidan no asistir hasta el cerro.
Los bailes que se realizan en el cerro igual se presentan en el zócalo del municipio, donde el tránsito para los turistas y personas es más accesible.
