El gobernador Miguel Barbosa Huerta quiere hablar con el rector de la BUAP, Alfonso Esparza Ortiz, no solo de la seguridad de los estudiantes sino de los asuntos financieros de la institución, entre ellos el caso del club Lobos.
Y es que el rector de la máxima casa de estudios en el estado fue señalado por un empresario de desviar recursos públicos al equipo de futbol; sin embargo, mediante auditorias propias y que el Consejo Universitario avaló, Esparza Ortiz fue exonerado de la acusación.
En una conferencia de prensa, Barbosa Huerta explicó que quiere “dialogar” con el rector sobre las finanzas de la institución, pues esta vive de recursos federales y estatales, por ello, insistió, las universidades públicas son entes que están obligadas a rendir cuentas ante las instancias correspondientes.
Sin embargo, hasta la fecha, el mandatario poblano no ha recibido algún planteamiento formal del rector o la universidad para tener un diálogo, pero “accederé con gusto si me lo piden”.
“Quitemos los protocolos. El gobernador se llama Miguel, el rector Alfonso; no soy el señor gobernador, ni es el señor rector, somos servidores públicos”, dijo respecto a la posición que tiene cada uno, respetando la autonomía de la BUAP.
Estas afirmaciones de Barbosa Huerta se dan luego de que el pasado 9 de agosto se realizaron auditorías internas en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), donde se rechazó que Esparza Ortiz incurriera en un desvió de 400 millones de pesos para el Club Lobos.
En otro tema, una comisión del Frente Estudiantil Educación Para Todos (FEET), entre los que había jóvenes que no pasaron el examen de la BUAP, se reunió con el gobernador para analizar las alternativas que tienen, situación ante la que Barbosa Huerta pidió al rector entablar igualmente un diálogo con los inconformes que mantuvieron un plantón de 27 días en el zócalo.
