Romeo Pérez Ortiz, especialista en matemáticas por la Universidad Estatal de Lomonosov, Rusia, señaló que son 30 años de rezago el que tiene México; mientras que casi la mitad de las personas en edad de estudiar no lo hace, sobre todo en Chiapas, Oaxaca y Guerrero.
Así lo señaló durante una conferencia magistral dada a estudiantes de Tecomatlán, donde resaltó que, de acuerdo con el informe de la evaluación PISA, en 2015, México ocupó el lugar 57 de 72 países participantes, y por el foro económico mundial, el 118 de 144.
En tanto, de cada 100 niños en Rusia el 54 por ciento logra egresar de la universidad, en Canadá el 50 por ciento, y el promedio en la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) es de 43 por ciento, pero en México sólo el 18 por ciento logra este nivel de estudios, comparó el académico antorchista.
Según este organismo, mientras a los niños se les imparten mil 83 horas clase en el país chileno y 940 en Estados Unidos, en México apenas es de 800 horas. “Y, además, somos el país con los salarios docentes más bajos” recriminó.
También agregó que el promedio de alumnos por aula es de 15 alumnos en la OCDE y en México es de 30.
En Luxemburgo se invierte por estudiante de preparatoria 19 mil 800 dólares por alumno, la OCDE invierte en promedio 10 mil 454, y México 4 mil 489, es decir que 31 por ciento de planteles escolares que no tiene agua de la red pública, 42 por ciento de planteles en Guerrero, 11.2 por ciento en Chiapas no tienen energía eléctrica y además carecen de baño, equipo de cómputo e Internet.
Refirió que en las evaluaciones de matemáticas, los estados de Tabasco, Guerrero y Baja California Sur resultan los más bajos, y en cuanto a la lectura la mitad de los mexicanos, aproximadamente, no abrió un libro en 2016.
En tanto, en Rusia se leen 16 libros per cápita al año, y en México el 45 por ciento lee un ejemplar al año.
Ante un rezago de esta magnitud, indicó, los gobiernos mexicanos suelen pretextar que no tienen recursos para invertir en la educación; pero mientras los países más avanzados como Dinamarca recaudan un impuesto equivalente al 45 por ciento del PIB, México apenas recolecta 17.4 por ciento y además, se estima que ha perdonado 188 mil millones de pesos a diversas empresas, por motivos de cancelación o condonación de créditos fiscales, criticó Pérez Ortiz.
