Un grupo de siete gobernadores y 32 líderes del albiazul coincidieron en la urgencia de que Ricardo Anaya Cortés y Damián Zepeda Vidales renuncien a la dirigencia nacional del Partido Acción Nacional (PAN) por la derrota en los comicios del 1 de julio.
Martín Orozco Sandoval, gobernador de Aguascalientes, señaló que siete de los integrantes de la Asamblea de Gobernadores de Acción Nacional (Goan), se pronunció porque el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) panista revise el “fracaso electoral” y nombre a su nuevo líder nacional.
“Los gobernadores teníamos que unirnos; lo estuvimos trabajando, fue una idea que los 12 (mandatarios panistas) vimos bien; al final firmamos siete, pero estoy seguro de que se integrarán todos”, comentó Orozco en entrevista con Proceso.
Además de Orozco Sandoval, entre los firmantes se encuentran José Antonio Gali Fayad, de Puebla; Carlos Mendoza Davis, de Baja California Sur; José Rosas Aispuro Torres, de Durango; Francisco Domínguez Servién, de Querétaro; Carlos Joaquín González de Quintana Roo, y Francisco Javier García Cabeza de Vaca, de Tamaulipas.
Anaya y Zepeda, sin legitimidad: calderonistas
Por su parte, 32 panistas de todo el país, en su mayoría diputados y exdiputados identificados con el excandidato Felipe Calderón Hinojosa, aseveraron que, tras la derrota del 1 de julio, Anaya Cortés, excandidato presidencial, y Zepeda Vidales, presidente interino del PAN, “deben renunciar ya, pues no tienen legitimidad colectiva para seguir conduciendo al partido”.
En este sentido, también demandaron la renuncia inmediata de todos los integrantes del CEN del PAN, convocar a una Comisión Permanente para nombrar “de manera urgente” a un presidente interino y una auditoría financiera a los ejercicios de 2017 y 2018.
Asimismo, pidieron que una “comisión plural de miembros del partido” analice la conformación de la coalición Frente por México (PAN, PRD y MC), que abanderó a Anaya Cortés, así como los métodos de elección interna de todos los aspirantes en proceso electoral.
Cabe recordar que Anaya Cortés dio a su partido el peor resultado en una elección presidencial desde 2000, al obtener de 12 millones 582 mil 741 votos, es decir, 22.26 por ciento de los sufragios totales para la elección presidencial.
Editado por Luis Alberto Palacios