La Comisión de Derechos Humanos del Senado pidió a la FGE presentar un informe del cumplimiento de recomendaciones por la CDH por presuntas irregularidades, mientras que a la SSP le solicitó implementar políticas públicas adecuadas en los Ceresos.
En el punto 22 del orden del día se enlistaron siete dictámenes, para su aprobación, de dicha comisión de la cámara alta del Congreso de la Unión, de los que dos son para Puebla.
El 22.1 exhorta a la Fiscalía General del Estado (FGE) a que detalle los planes y estrategias instrumentadas para cumplir las recomendaciones de los dos organismos autónomos de derechos humanos, en relación a presuntas trasgresiones a la seguridad jurídica y uso de métodos contrarios a la dignidad humana.
Lo anterior, porque, de acuerdo con el punto de acuerdo, retomado por la comisión luego de que el PRI hizo la petición, en 2017, la Comisión de Derechos Humanos (CDH) de Puebla emitió cuatro recomendaciones a la FGE en la se acreditó que detenidos fueron golpeados, torturados y hasta incomunicados.
Recordó que según el Índice Estatal de Desempeño de las Procuradurías y Fiscalías elaborado por Impunidad Cero, el de la de Puebla se encuentra entre las tres peores a nivel nacional.
También, recalcó que durante el sexenio de Rafael Moreno Valle (2011-2017) la CDH recibió mil 59 quejas.
Autogobierno en Ceresos de Puebla
Luego, la misma comisión, en el punto 22.7 señala que el 14 de septiembre de 2017, la senadora Lucero Saldaña Pérez, del PRI, solicitó que se le pidiera al gobierno del estado, a través de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP), que tiene a su cargo los Centros de Reinserción Social (Cereso), establecer programas para prevenir actos de corrupción en estos espacios.
Lo anterior, al argumentar que se han presentado denuncias de extorsiones, violaciones físicas y trasgresiones al debido proceso.
La comisión aprobó también ese punto de acuerdo ya que aseveró que la reinserción social significa volver a encauzar a la persona que ha delinquido dentro de la sociedad, lo cual no se ha logrado con el Sistema Penitenciario Mexicano.
Recalcó que, de acuerdo con la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), en 2016 se acreditó que hay deficiencia de atención médica, autogobierno, falta de capacitación de trabajo, no hay colchones ni utensilios para comer.