Regidores de Puebla avalaron imponer sanciones económicas a empresas particulares y públicas, que al realizar sus trabajos, intervengan la vía pública y dañen ésta con multas que serías de más de 10 mil pesos por metro cuadrado afectado.
Durante una sesión de comisiones unidas de Infraestructura y Desarrollo Urbano, se aprobó reformar el libro tercero del capítulo 17 del Código Reglamentario del Municipio (Coremun) de Puebla, específicamente al artículo 718 de este.
El Coremun establece que las sanciones actuales sólo incluyen a los fraccionados y desarrolladores de vivienda, a quienes se multa con “130 veces el valor diario en Unidad de Medida y Actualización (UMA), más la reparación del daño”, lo que equivale a 10 mil 478 pesos, más dicha reparación; mientras que a los Directores Responsables de Obra (DRO), ente perteneciente a la Dirección de Desarrollo Urbano y encargado de supervisar la correcta ejecución de las obras, sólo se les hace una amonestación por escrito.
Por ello, la modificación que se presentará al Cabildo, para que a su vez le dé “luz verde”, busca imponer una multa de 130 veces el valor diario en UMA, que de acuerdo con el Inegi es de 80.60 pesos, es decir 10 mil 478 pesos por metro cuadrado afectado, más la reparación del daño.
No sólo para obras inconclusas
Además de especificar que no sólo se amoneste a los desarrolladores de vivienda, sino que se incluyan organizaciones públicas como la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y privadas como Telmex y Agua de Puebla, así como a cualquier persona “para que a todos les quede el saco” y nadie esté “legalmente exento de no pagar por algún desperfecto; de igual manera, se propuso que los DRO que supervisan estas obras, estén expuestos a sufrir una multa económica y no sólo por escrito.
Por su parte, el regidor Iván Galindo Castillejos explicó que esta modificación también aplicará en los casos en los que al terminar la obra se haya dañado la vía pública y no sólo para los trabajos inconclusos, como se había manejado.
Además, dijo que se involucrarán la Dirección de Desarrollo Rural y la Secretaría de Infraestructura, pues la primera otorga los permisos y a la cual pertenecen los DROs, mientras que la segunda es la encargada de supervisar que, al término de cualquier trabajo, “todo esté igual o mejor a como estaba antes de iniciarlos, aspecto especificado en el mismo Coremun.