Jorge Cruz Bermúdez, quien está ligado al morenovallismo, fue electo como nuevo líder estatal del PRD, mientras que Vladimir Luna Porquillo, quien anteriormente había sido uno de los más críticos del exmandatario, quedó como como secretario general.
Este domingo se realizó el séptimo pleno extraordinario del Quinto Consejo Estatal del PRD, que se llevó a cabo en el hotel Occidental FJ-Barcelo, con un proceso avalado por la delegada de dicho partido en la entidad, Dulce María Arias Ataide, en comparación con la anterior dirigencia.
Ya en rueda de prensa, a la que habían citado a la 1 de la tarde, pero empezó dos horas y media después, Cruz Bermúdez manifestó que esta renovación se dio tras la renuncia de Carlos Martínez Amador, el viernes pasado, quien argumentó que dejaba el cargo por “motivos personales”.
Aseveró que los nombramientos fueron con la participación de todas las corrientes del partido, por lo que fue por unanimidad, con los votos de los 158 consejeros que asistieron, ya que también se hicieron los cambios en 19 carteras de las que diez fueron para mujeres.
Sostuvo que “renunciará de inmediato” al Comité Administrador Poblano para la Construcción de Espacios Educativos (Capcee), del que es director, para dedicarse a su nueva encomienda, al tiempo de señalar que de cara al proceso electoral trabajarán “como partido y no como corriente” para formar la coalición con el PAN y Movimiento Ciudadano (MC).
Tras cuestionarles sobre cómo quedaron divididas las carteras al interior del Partido de la Revolución Democrática (PRD), el nuevo dirigente se limitó a decir que estuvieron distribuidos entre todas las corrientes, para hombres y mujeres.
“Valdría la pena destacar que no estamos buscando quién tuvo más o menos carteras, porque estamos en un ejercicio de unidad, por lo tanto no hay ni ganador ni vencido, quien gana esta tarde es el PRD, son 19 carteras están muy pluralmente repartidas, extremadamente balanceadas”, pronunció.
No hay sumisión al morenovallismo: Luna
Por su parte, Porquillo Luna comentó que con la nueva dirigencia se buscará generar equilibrios dentro de dicho instituto político y “defender” los espacios, así como establecer los criterios que permitan transitar a la izquierda en Puebla.
Al cuestionarlo sobre que anteriormente fue uno de los principales críticos del gobierno de Moreno Valle y ahora ya comparte la dirigencia con uno de los funcionarios que ligado al exmandatario, refirió que está ejerciendo sus derechos como militante perredista, además de que si “llegué aquí” es por una “situación de contrapesos”.
“En tiempo atrás he de reconocer que fuimos críticos, pero no por eso es una sumisión o subordinación, lo digo muy bien claro, simplemente estamos participando en la vida orgánica del partido y en las actividades que se llevan a cabo”.
En ese tenor, comentó que en los siguientes días podrían reunirse con el dirigente del Partido Acción Nacional (PAN), Jesús Giles Carmona, para tratar el tema de la alianza electoral tal y como ya se estableció a nivel nacional.
Rechazó que vaya a buscar algún cargo de elección popular al manifestar que en la reforma que se hizo en el último consejo nacional, se modificaron los estatutos para establecer que todos los ocupen un cargo en los comités municipales, estatales y nacionales no pueden aspirar a otro puesto, por lo que “estamos claros en que tenemos que fortalecer el partido y no en candidaturas personales”.
Dirigencia es temporal: delegada
Por su parte, en entrevista por separado, Arias Ataide indicó que este proceso se hizo para darle certeza a que los acuerdos y determinaciones que se tomaran al interior del partido fueran válidos debido a las elecciones que hay en puerta.
Y es que, explicó, con el anterior dirigente Martínez Amador se corría riesgo de que lo removieran del cargo, motivo por lo que ya se tenía impugnado su nombramiento, motivo por lo que se dio el cambio de presidente estatal.
“La verdadera razón es la renovación de todos los órganos para darle valides al proceso electoral, no estábamos pensando exclusivamente en la presidencia del partido, porque nuestros órganos partidarios después de 3 años podrían ser cuestionados”, expresó.
Bajo ese contexto, la delegada refirió que esta nueva dirigencia será temporal, ya que durará alrededor de ocho meses y, posteriormente, de acuerdo con los estatutos, tendrán que renovarse todos los órganos por la vía de la elección de los militantes.
Cabe mencionar que, Martínez Amador fue designado el pasado 5 de noviembre, como dirigente sustituto del PRD por parte del Consejo Estatal con 120 votos a favor, tras la expulsión de la entonces líder del sol azteca en Puebla, Socorro Quezada Tiempo.
