La aprobación del presupuesto 2018 de la dirección de Industrial de Abastos o Rastro dependerá de la realización de un proyecto para la reparación de su planta tratadora de agua, el cual deberá estar respaldado por especialistas.
Así lo acordaron los integrantes de la Comisión de Patrimonio y Hacienda Pública durante la reunión con el titular del Rastro, Julio César García Ángeles, para el análisis del presupuesto que ejercerá su dependencia el siguiente año.
En su propuesta, García Ángeles solicitó 9 millones de pesos, de los cuales 883 mil pesos serían para la reparación de la planta tratadora.
Sin embargo, los regidores manifestaron su preocupación por la falta de certeza en que las descargas que realiza el rastro al drenaje estén apegadas a la norma 002 de la Semarnat, por lo que se negaron a avalar recursos para dar mantenimiento a la planta de tratamiento que ya no sirve.
El regidor presidente de la Comisión de Servicios Públicos, Iván Galindo Castillejos, puntualizó que el Rastro contaba con un recurso adicional de más de 700 mil pesos para realizar reparaciones a la planta tratadora, las cuales no se realizarían hasta no contar con el aval de expertos del Río Atoyac, no obstante, el titular del rastro les informó este día que los trabajos de reparación iniciarán el lunes próximo.
Malos manejos, “por adeudo de Soapap”
En tanto, la regidora presidente de la Comisión de Medio Ambiente, Myriam Arabian Couttolenc, señaló que los malos manejos de administraciones anteriores derivaron en la acumulación de un adeudo por 1.5 millones de pesos al Soapap por descargas residuales
Asimismo propuso tres opciones para garantizar el buen manejo de las aguas residuales del rastro, la primera –dijo– reparar totalmente la planta con una inversión adicional del pago de excedentes por los niveles de contaminación de los residuos; la segunda, buscar licitar la construcción de una nueva planta tratadora; y la tercer, contratar una empresa alterna que realice el tratamiento del agua.
De manera que la dependencia deberá replantear su presupuesto, así como buscar un mecanismo para garantizar el funcionamiento de su planta de tratamiento.
Cabe mencionar que la norma 002, establece los límites máximos permisibles de contaminantes en las descargas de aguas residuales a los sistemas de alcantarillado urbano o municipal; además el ayuntamiento de Puebla incrementó de 11 a 31 los parámetros permisibles para realizar descargas de aguas residuales.
