En la colonia El Mirador (La Calera), donde también hay un área natural protegida, se está presentando un crecimiento como “invasión hormiga” que no se da de manera acelerada, pero sí tiene un impacto ambiental.
La amenaza más grande siguen siendo los desarrolladores inmobiliarios, que han tramitado licencias, las cuales superan la jurisdicción del municipio, pues son otorgadas por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), señaló la regidora Myriam Arabián Couttolenc.
En Comisión de Desarrollo Urbano realizada este jueves, por su parte, el Instituto Municipal de Planeación (Implan) indicó que no existen otorgamientos de uso de suelo para los asentamientos humanos irregulares y dispersos que, además, no cuentan con servicios básicos, los cuales han empezado a invadir la zona forestal que, aunque aún no irrumpen la zona protegida, podría convertirse en una amenaza para ésta.
Dicho instituto se comprometió a generar una propuesta de programa para regular el uso de suelo y establecerá convenios específicos con los habitantes de esa zona, pero aseguró que “construir en esa área miles de viviendas, no es factible”.
En agosto, al menos 300 árboles fueron derribados para construir un fraccionamiento de Grupo Sadasi en el cerro de La Calera, que significaban el 25 por ciento de los mil 200 ejemplares que se estima serán talados en un perímetro de 2.4 hectáreas.
Un mes después, el ayuntamiento y dicha firma, en colaboración de familias, reforestaron con 2 mil árboles dos hectáreas del área natural protegida.
Parque de El Refugio tendría acceso vehicular
Por otro lado, Arabián Couttolenc e Iván Galindo Castillejos indicaron que, el parque Ángela Peralta, ubicado en el barrio de El Refugio, podría contar con una “servidumbre de paso” a petición de un particular que posee una propiedad a espaldas del mismo y quiere ingresar su vehículo; habría realizado obras sin permiso.
Ambos difirieron en el otorgamiento de dicho acceso vehicular al ciudadano, pues la primera señaló que el ayuntamiento debe proveer de accesos de este tipo a los particulares, mientras que Galindo Castillejos sostuvo que se trata de una “comodidad”.
El regidor priista indicó que el parque fue “modificado” y una parte del mismo había sufrido alteraciones a causa de trabajos realizados sin permiso, que al tratarse de un inmueble público, ameritan una sanción contra quien resulte responsable.
Por su parte, Arabián Couttolenc explicó que dicho parque fue construido tras la donación de una parte de una exfábrica textil ubicada entre la 28 y la 30 Poniente, esquina con la calle 5 Norte, situación que, al construirse el parque, dejó sin accesos a la fábrica.
La resolución de dicha petición se decidirá en una mesa de trabajo, de la cual no fue detallada la fecha, con la Secretaría de Desarrollo Urbano y la Sindicatura.
En tanto, el regidor Iván Galindo Castillejos solicitó un plebiscito con los vecinos de la colonia Vicente Guerrero por el cambio de nombre de la calle “Matamoros” a “Pedro Moreno”, situación que –señaló— entorpecería actividades de desarrollo urbano.
