Libertad Aguirre Junco y Laura Cid Esparza, aspirantes de Morena a la alcaldía de Puebla, exigieron al CEE “piso parejo” y una elección “limpia” para reconocer a la candidata “sin berrinches”, pues la precandidatura a la gubernatura ha generado división.
Al señalar que su contrincante Claudia Rivero Vivanco rechazó el llamado a la unidad al que fue convocada este lunes, advirtieron que de continuar con esa actitud, el papel de los candidatos de Morena en la elección del 2018 no será protagónico, sino únicamente presencial.
Por eso, ambas competidoras por la coordinación municipal –cargo previo a la candidatura a la alcaldía– coincidieron en rueda de prensa que el Comité Ejecutivo Estatal (CEE) debe establecer una contienda equitativa y transparente, pues la de la estatal –para la gubernatura– trajo problemas al partido.
Sin dar su respaldo a Miguel Barbosa Huerta como coordinador estatal, refirieron que su designación inconformó a la militancia de cepa, con años trabajando en el movimiento que ahora no se ven representados por el senador experredista.
Aunque no cuestionaron la legalidad de su designación, consideraron que los morenistas quieren “a un líder con quien se identifiquen y represente un cambio”.
Por ello, se sumaron a la exigencia de que se transparente la elección de Barbosa Huerta, a fin de disipar la especulación de que fue por “dedazo”.
Trato preferencial
Para que no surjan inconformidades en la elección por la coordinación municipal, Aguirre Junco enfatizó en que antes de la elección interna debe haber “piso parejo” para las competidoras, pues de ahora se omite información a alguna o se convoca a eventos “a una y a las otras no”.
Eso en alusión a Rivera Vivanco, quien fue invitada al “llamado a la unidad”, pero no acudió, además de que ha sido señalada de ocupar su cargo como secretaria de Diversidad Sexual del CEE para favorecer su aspiración en lugar del partido.
Ante ello, Cid Esparza enfatizó que Morena requiere de “mujeres comprometidas, preparadas y que conozcan los problemas de Puebla” y no de quienes quieren un cargo sólo para utilizarlo en su beneficio.
También hizo menos la aspiración de la activista Paola Migoya Mastretta, quien ha manifestado su interés por competir por la coordinación municipal: “Ella (Paola) ni vive en Puebla; un día dice que va a participar (en la contienda), pero se le invita a un debate y dice que no”, señaló.
No obstante, le hicieron llamado, al igual que a Rivera Vivanco, para que se sumen a “la unidad” de aspirantes, para que cuando sea el día de la elección, y se designe a quien será la eventual abandera, las perdedoras respeten el resultado.
“Se necesita estar unidas, para que después no haya rupturas ni berrinches que sólo hacen mal al partido”, expresó Aguirre Junco, en referencia al académico Enrique Cárdenas Sánchez, que rompió su relación con Morena tras perder ante Barbosa Huerta.
