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Padres de Paulina Camargo denuncian amenazas de familiares de Sosa. Foto: Especial

Los padres de Paulina Camargo Limón presentaron una denuncia por amenazas de parte de Gerardo García Pérez y José Luis Sosa Vázquez, abogado y padre de José María Sosa Álvarez, presunto responsable del homicidio de quien fuera su novia.

En rueda de prensa, la denunciante María del Rocío Carmen Limón Maldonado, acusó que desde que iniciaron las movilizaciones pacíficas para exigir a la Fiscalía General del Estado (FGE) de Puebla localice a su hija quien se encuentra en calidad de desaparecida desde agosto de 2015 “el acoso ha ido incrementando”.

Sostuvo que familiares del inculpado le han hecho amenazas a través de redes sociales y vía telefónica para que dejen de buscar a su hija Paulina.

Por ello, decidió junto con su esposo Rolando Camargo Muñoz, interponer la denuncia –el pasado 3 de febrero– por el delito de amenazas que quedó asentado en el expediente 744/2017/UAT-04 de la unidad de atención inmediata de la FGE.

Señalaron que también han solicitado una reunión “urgente” con el gobernador Antonio Gali Fayad para hacer de su conocimiento el caso de Camargo Limón, por lo que esperarán su respuesta.

Dictarán nuevo auto este viernes

Comentaron que hasta el momento la defensa de Sosa Álvarez no ha presentado pruebas sobre “que mi hija estuvo conectada después de que se denunció por su desaparición y que conversaciones con hombres que la amenazan de secuestro”.

Asimismo, dieron a conocer que este viernes 17 de febrero vence el plazo para que el juez tercero para emitir nuevamente sentencia a Sosa Álvarez, quien obtuvo un amparo en agosto de 2016, por lo que recurrieron al Segundo Tribunal Colegiado y están en espera resolución del juez tercero que aun subsana lo observado por los magistrados.

Cabe mencionar que el grupo legislativo del PAN presentó una iniciativa de reforma al artículo 312 del Código Penal, con la que podría procesarse a un presunto responsable de homicidio aun cuando el cuerpo de la víctima este desaparecido, pero existan evidencias contundentes del crimen; no obstante, sigue en la “congeladora”.

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