Los gobiernos estatales, y en el caso de Puebla, a cargo de Rafael Moreno Valle, están implicados en el robo de combustible, lo que es una muestra de impunidad “absoluta inaceptable e inadmisible”, señaló el economista Manuel Aguilera Gómez.
Lo anterior, previo a la presentación de su libro “El petróleo mexicano. Conflicto, esperanza y frustración en el auditorio de la Facultad de Economía de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).
En entrevista para Ángulo 7, indicó que los servidores públicos de todos los niveles están implicados, y dijo que es una “irresponsabilidad” no poder detener el robo de combustible, en los diferentes estados de la república, incluyendo a Puebla en la zona denominada como triangulo rojo –Acatzingo, Palmar de Bravo, Tecamachlaco, Tepeaca y Quecholac–.
Asimismo, agregó que es “inadmisible” que las autoridades poblanas sean incapaces de detectar los tráileres en donde los huachicoleros trasladan la gasolina robada tras la perforación de los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Pemex “ahorcado”
Aguilera Gómez aseveró que Pemex “está siendo ahorcado”, pues carece de la capacidad para supervisar los más de 10 mil kilómetros de ductos e impedir que el combustible sea robado.
Por ello, llamó a las autoridades estatales a ser más enérgicos para frenar la problemática, y que –además– sea enfrentado “con autoridad y decencia”, lo que permitirá “abatir la corrupción que se ha gestado en esta materia”, más allá del aumento de los operativos carreteros.
Cabe mencionar que el robo de combustible en Puebla ha provocado que las ventas de las gasolineras se redujeran en un 80 por ciento en lo que va de 2016, lo que representa una el cierre de negocios y la pérdida de empleos.
