El primer auto eléctrico mexicano que sale de la planta Puebla, propiedad de la empresa Zacua, y que adquirió el gobierno del estado, se convertirá en un vehículo utilitario para cumplir con diversas labores de la Secotrade.
El primer auto eléctrico mexicano que sale de la planta Puebla, propiedad de la empresa Zacua, y que adquirió el gobierno del estado, se convertirá en un vehículo utilitario para cumplir con diversas labores de la Secotrade.