El presidente Andrés Manuel López Obrador respaldó a Layda Sansores San Román, gobernadora de Campeche. Pero también afirmó que, en caso de existir abuso de autoridad contra los policías de la entidad, existirán castigos al respecto.
Durante la conferencia matutina, el presidente fue cuestionado sobre las exigencias de elementos de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) de Campeche, quienes demandan la destitución de Marcela Muñoz Martínez, titular de esta dependencia. Al respecto señaló que espera que logren llegar a acuerdos con la gobernadora morenista Sansores San Román.
Expresó que existe “mano negra” en las protestas, pues consideró que hay intereses “politiqueros” que buscan manipularlos. Por lo que exigió que “jueguen limpio”, sin embargo, destacó que no lograran lo que buscan, pues lo que hagan “se les revierte”.
“Les recomendaría a los policías de Campeche que lleguen a un acuerdo con Layda, que es una gobernadora honesta, de buenos sentimientos y que no se dejen manipular, porque hay mano negra”.
Andrés Manuel López Obrador
En ese sentido, Antonio Jiménez Gutiérrez, diputado del congreso de Campeche, señaló que las protestan fueron politizadas por el PRI y Movimiento Ciudadano. Pues consideró que estos partidos buscan obtener beneficios electorales a costa de las necesidades de los policías.
Protestas de policías a Layda Sansores
Los policías iniciaron las protestas el pasado 16 de marzo, luego de su participación de un motín en el penal de San Francisco Kobén, Campeche. Sin embargo, denunciaron que los mandos superiores los enviaron sin la preparación y equipo necesario para controlar una situación de este tipo.
Dando por resultado lesiones en al menos 30 de los agentes, así como agresiones sexuales contra mujeres de la corporación cometidas por los internos.
En respuesta, la gobernadora separó de su cargo a la Subsecretaria del Sistema Penitenciario Prevención y Reinserción Social. Así como al Director de la Policía Estatal Preventiva, quien estuvo al frente durante el operativo en el Cereso de Kobén.
