Después de estar 6 días hospitalizada, la icónica y legendaria actriz, cantante, conductora, modelo y política, Silvia Pinal Hidalgo, falleció este 28 de noviembre a los 93 años de edad, por complicaciones de salud derivadas de una infección en las vías urinarias.
La primera actriz, considerada cómo la ultima “gran diva” del cine de oro mexicano, falleció en paz rodeada de sus seres queridos. Su hijo, Luis Enrique Guzmán, confirmó la muerte de esta leyenda actoral a través de un comunicado en redes sociales.
Pese a que algunos familiares y amigos de Silvia Pinal habían dicho esta mañana, ante los medios de comunicación, que la mujer estaba recuperándose de forma exitosa en el hospital, desafortunadamente su estado empeoró la tarde de este jueves.
En los últimos días ya se había especulado mucho sobre la salud de la matriarca Pinal, sobre todo después de que su hija, la cantante Alejandra Guzmán Pinal, revelara que la mujer estuvo desde el 22 de noviembre en terapia intensiva, ya que presentó una arritmia cardíaca y baja presión arterial.
Ante esto, medios de comunicación se aglutinaron en las afueras del hospital en que la actriz fue internada, con el fin de entrevistar a todo su circulo cercano. Entre ellos se encontraba su exesposo, el cantante Enrique Guzmán Vargas, quien horas antes del fallecimiento de Silvia Pinal se refirió a ella como “una mujer fuerte y perseverante”.
El legado de Silvia Pinal: Un icono del cine mexicano
Nacida en Guaymas, Sonora, Silvia Pinal comenzó su carrera actoral en 1949, tras años de haber sido modelo y edecán en diferentes eventos mediáticos. Su belleza y talento cautivó a las audiencias mexicanas tras su rol en la película del comediante German Valdés: “El Rey del Barrio”.
Su aparición en grandes clásicos del cine mexicano la convirtieron en toda una celebridad, pero no fue hasta su roles en “Viridiana”, “El Ángel Exterminador” y “Simón En El Desierto”, del director español Luis Buñuel, que se convirtió en toda una leyenda del cine de arte internacional.
Su papel en la distribución y conservación del trabajo de Buñuel, quien fue su cercano amigo y mentor, la han cimentado cómo uno de los personajes más importantes no sólo del cine de oro mexicano, sino de la industria cinematográfica a nivel mundial.
Pero su importancia en otras ramas del arte no se puede ignorar, siendo ella una de las pocas musas que pintor mexicano Diego Rivera tuvo en sus últimos años de vida. De hecho, el autorretrato que el aclamado artista realizó de ella, en la actualidad se valora en 183 millones 802 mil 500 pesos.
Una vida en la televisión
Con el tiempo, la primera actriz también llegó a trabajar cómo cantante, conociendo así a quien sería su tercer esposo, Enrique Guzmán. En los sesentas, ambos tuvieron juntos el famoso programa de televisión “Silvia y Enrique”, donde deleitaron a las audiencias mexicanas con los éxitos más populares del rock sesentero mexicano, llevando a la fama a agrupaciones cómo “Los Apsons”.
Y es que el auge de Silvia Pinal nunca se detuvo, ya que en los setentas y ochentas apareció en una gran cantidad de telenovelas, cómo lo fueron “Cuando los hijos se van”, “Carita de Ángel” y “Tiempo de Amar”.
En los noventa la actriz tuve un repique en su carrera, al ser productora, guionista, conductora e incluso actriz del programa que ella misma creo; “Mujer casos de la vida real”. En este, ella presentaba historias de abuso, maltrato y logros de mujeres, personas discapacitadas e incluso gente de la comunidad LGBTQ+.
Sus incursiones incluso llegaron a la política, fungiendo cómo diputada del Congreso de la Unión del 1991 al 1994. Durante su gestión siempre se esforzó para que el gobierno mexicano invirtiera más recursos en la Secretaría de Cultura y el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
Previo a su fallecimiento, sus 90 años, Silvia Pinal aún trabajaba en el teatro, y ocasionalmente la televisión, pero ahora tras su muerte se puede decir que se ha ido una de las grandes figuras del folklor mexicano, la industria del entretenimiento y el cine latinoamericano.