Los candidatos asesinados durante el proceso electoral no han tenido justicia.

Mientras atestiguamos “curiosidades” electorales que se pensaban superadas y que ahora son tipificadas como delitos, o violaciones a la Constitución como la sobrerrepresentación en la Cámara baja, prevalece la impunidad de los homicidas y delincuentes de esta época.

Según la consultora Laboratorio Electoral en el proceso por concluir hubo: 82 homicidios, de los cuales 34 fueron aspirantes a una candidatura; 85 atentados; 108 amenazados; 17 secuestrados y señaló que el partido político con más asesinados fue MORENA

Los fantasmas de la impunidad se aparecen como dudas:

¿Se ha divulgado cuántos presuntos delincuentes están en el ámbito de la procuración de justicia producto de la investigación de los delitos citados? Hagan memoria son pocos los casos con avances en las investigaciones, como el de Celaya, Gto., o el atentado en la Alcaldía Cuauhtémoc, en la CDMX.

¿Hubo violencia electoral el día 2 de junio de 2024? Si, asesinatos en el estado de Puebla y violencia con la modalidad de amenazas en diversas partes territorio nacional..

¿Con la jornada comicial se acabó la inseguridad electoral? Al parecer no, pues hemos sabido de los casos que se sucedieron en Michoacán con el asesinato de la alcaldesa y la violencia electoral en Chiapas.

¿Continuará la violencia electoral después de los cómputos distritales? Todo indica que no ha concluido la tendencia de la violencia por motivos de orden electoral, puede llegar hasta la toma de posesión de las autoridades electas.

¿A quién le interesa que no avancen los casos en la procuración de justicia? Por supuesto que los primeros beneficiados son los autores materiales de los delitos y en segundo lugar los autores intelectuales que idearon y dieron las órdenes; asimismo, a las autoridades estatales y federales porque pudieran “cantar” los presuntos delincuentes.

Mientras la atención pública esté dirigida a otros acontecimientos, el tema de la procuración de la justicia no avanza, ni para los propios miembros asesinados de los partidos que gobiernan.

Cuando no se hace algo a favor propio o tiene fama de “codo” dice un dicho popular: “No dispara ni en defensa propia”.

*Las opiniones expresadas en esta sección son de exclusiva responsabilidad de quienes las emiten y no representan necesariamente la línea editorial del portal de noticias Ángulo 7.

Sociólogo y Maestro en Administración Pública. Ha laborado en el gobierno federal y en gobiernos locales en áreas de gobierno y seguridad. Ha sido profesor en la Universidad de las Américas y del...