El IMSS en Puebla realizó la Jornada Quirúrgica de Urología en el Hospital Chignahuapan, dirigida a la población de las regiones, donde se valoró a 214 pacientes y se llevaron a cabo 112 cirugías relacionadas con padecimientos de la especialidad.
Por medio del Programa IMSS-Bienestar se dio atención a los pobladores de Chignahuapan y zonas aledañas, lo cual fue posible gracias a un equipo de médicos y personal especializado, con amplio reconocimiento por su loable labor, expresó Aarón Pérez Cabrera, supervisor médico del programa.
Pérez Cabrera detalló que, gracias a estas acciones el IMSS en Puebla refuerza sus estrategias para mejorar la vida de pacientes con diversas enfermedades urológicas, como por ejemplo: la hiperplasia prostática, en cuyos casos en más de 50% de la población con ese diagnóstico que requiere de un proceso quirúrgico.
Asimismo, Jorge Ignacio Bolaños Perea, coordinador de las jornadas Médico Quirúrgicas de Urología, explicó que se atendió a pacientes adultos con hiperplasia prostática, litiasis en vías urinarias y patología de escroto. Además, se recibieron niños con problemas de estrechez de la abertura del prepucio (fimosis) y de testículos en posición incorrecta (criptorquidia),
Por otra parte, Miguel Ángel López Martínez, director del Hospital de Chignahuapan del programa IMSS-Bienestar, explicó que se otorgó una alta demanda de consultas y de cirugías a personas que viven en zonas rurales de difícil acceso y la oportunidad de ser valorados por un médico especialista.
El equipo multidisciplinario que llevó a cabo los procedimientos de las jornadas está integrado por 25 especialistas, entre ellos urólogos, residentes especialistas, enfermeras quirúrgicas e intensivistas.
La jornada se diseñó para cinco días, dando inicio con la valoración de más de 200 pacientes, lo cual permitió la toma de decisiones sobre el tipo de tratamiento médico o quirúrgico por padecimiento.
El proceso consistió en dar atención médica integral a los pacientes en las instalaciones del hospital, con el objetivo de tener un mejor diagnóstico, ya que la mayoría de los usuarios tienen limitaciones económicas para realizarse estudios de gabinete en forma privada.
Por su parte, la paciente Alicia Rebolledo, quien esperó cuatro años para su procedimiento por incontinencia urinaria expresó: “esta cirugía me cambió la vida, y yo pido que se difundan este tipo de apoyos a la comunidad porque mucha gente lo necesita”.
Por otro lado, un familiar de paciente que se sometió a cirugía en esta jornada compartió: “mi hermano llevaba tres meses con el malestar de la próstata, y nos enteramos de la jornada en la clínica de mi hermano. Todo fue muy rápido, su operación fue ambulatoria y lo único que puedo hacer es agradecer”.
