Diana fue víctima de trata de personas. El agresor fue un familiar que aprovechó su vulnerabilidad, ya que ella quería estudiar en la Ciudad de México, sin embargo, fue el gancho para que la explotara sexualmente por 10 años.
Con los ojos cerrados le creyó, ya que fue abusada desde pequeña por su abuelo, quien le decía que, aunque ella dijera algo, nadie le iba a creer y la iban a tachar de mentirosa, lo que la orilló a “callar muchas cosas” por el temor a que nadie le hiciera caso.
Narró que ha tenido una vida “de mucho sufrimiento” pues fueron sus propios familiares quienes a base de mentiras la prostituyeron, primero en Irapuato y luego en la Ciudad de México.
En reiteradas ocasiones intentó escapar de sus captores, una vez en la capital del país, lo que le valió una golpiza y que la mandaran a Tijuana, en donde la vigilaba el hermano de su padrote, donde igual buscó hacerlo, para retenerla, la embarazó y cuando nació su hija se lo quitó la mamá de su victimario para que “le pensara” en irse.
“Yo dije, ya prácticamente ese es mi destino, aquí me voy a quedar, pues vivía resignada, decía, ya no, ya le intenté muchas veces, no voy a dejar a mi hija, tengo que estar aquí, me había acostumbrado a soportar los golpes, malos tratos, hacía todo lo que me decía, me portaba bien, fueron muchos años, estaba yo como en modo zombie”, narró.
Dijo que tuvo una madrota que la cuidada en Sullivan (zona de explotación sexual) en la Ciudad de México, porque ahí pagaban más, pero gracias a una amiga, igual víctima de trata, la ayudó a que saliera de esta vida de sufrimiento para poder estar con su hija y logró escapar y presentar una denuncia.
Su testimonio fue parte del foro “Retos y Desafíos en la Erradicación de la Trata y Explotación de Personas” que se realizó en el Congreso del estado.
Puebla sigue siendo foco rojo
Este testimonió muestra que Puebla sigue siendo uno de los puntos rojos de la trata de personas, porque es tránsito, destino y origen de las víctimas, ya que tres de cada diez mujeres son explotadas en otras ciudades como Tijuana, aunque es uno de los estados con más carpetas de investigación abiertas.
En entrevista con este medio, Karla de la Cuesta, de la Fundación “Alas Abiertas”, en el marco del Día Mundial contra la Trata de Personas, que es este 30 de julio, dijo que este problema se tiene prácticamente en todo el país, aunque en el caso de la entidad es más visible por la cercanía con Tenancingo, Tlaxcala.
Aseveró que este problema se da a simple vista, pues el 90 por ciento de las mujeres que son prostituidas en el país, que en el caso de la Angelópolis está el Centro Histórico, son víctimas de trata, por lo que una de las razones por las que sigue este problema es porque el sexoservicio está siendo normalizado.
“Si por decir que en comparación con otros estados que tiene cero carpetas de investigación Puebla está peor, no, quiere decir que está mejor porque si está poniendo atención, no es que haya un incremento, sino que hay un trabajo para combatirla, decir que en los otros estados no hay es irreal, porque las entidades prefieren ocultan sus cifras, expresó.
Y es que, de enero a junio de 2023, Puebla registró 24 víctimas mujeres de trata de personas, casi el triple que el mismo periodo de 2022, cuando fueron nueve, por lo que el estado pasó del octavo, al quinto con más incidencia en el país, esto de acuerdo con datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (Sesnsp).
Necesario erradicar prostitución para acabar trata
Ante esto, Karla de la Cuesta dijo que no se puede considerar que la prostitución es un trabajo es erróneo, porque se violan los derechos de las mujeres, por lo que no se puede a favor de uno y en contra del otro, ya que tiene la misma relación y es necesario que sea combatido.
Sostuvo que la primera responsabilidad es del Estado, que tiene que garantizar que las personas tengan protegidos sus derechos, ya que “sería ilógico” afirmar que una mujer prefiere estar 10 horas paradas en la calle para cubrir una cuota, en lugar de un trabajo formal.
Por ello, comentó que una de las opciones para erradicar esta problemática es abolir la prostitución y darle herramientas y formas de salida a las mujeres, apoyos y oportunidades, ya que en muchos de los casos cuando ya no son útiles para los tratantes se llegan a convertir en madrotas y lo terminan heredando.
Así como hacer “realmente” operativos para rescatar a las víctimas, ya que éstas nunca van a denunciar, pues todas son amenazadas, golpeadas y sin confianza ante las autoridades, además de que se necesitan refugios eficientes para protegerlas, ya que algunas llegan a tener hijos.
De igual forma, informó que están impulsando que la prostitución sea reconocida como violencia sexual en la Ley General de Acceso a una Vida Libre de Violencia, ya que los clientes son personas del sexo masculino y es una actividad ilícita que está basada en la supremacía del hombre sobre la mujer, que a su vez lo hace discriminatorio y de vulnerabilidad por género.
