Hasta septiembre de 2022, Puebla tenía la segunda tasa más alta de personas mayores de 18 años que fueron víctimas de discriminación en el país, con el 30.6 por ciento, un alza de 2.2 puntos porcentuales respecto a 2017, con lo que se ubicó por encima de la media nacional, del 23.7 por ciento.
Así lo dio a conocer la Encuesta Nacional sobre Discriminación (Enadis) 2022 del Inegi, la cual destacó que la entidad poblana sólo estuvo por debajo de Yucatán como el estado con mayor tasa de discriminación, con el 32.1 por ciento de su población.
El tercer estado en esa situación fue Querétaro, con el 30.5 por ciento; seguido de Ciudad de México, con el 29.6 por ciento; así como Jalisco, con el 27.1 por ciento.
En contraste, las entidades federativas con menor porcentaje de población de 18 años y más que refirió haber sido víctima de discriminación en los últimos 12 meses fueron Sinaloa (13.8 por ciento), Sonora (17.5 por ciento), Nayarit (17.9 por ciento), Nuevo León (18.4 por ciento) y Campeche (18.5 por ciento).
Discriminación sube en 5 años
De acuerdo con el reporte, el número de personas que manifestó haber sido víctima de discriminación en la entidad creció 2.2 puntos porcentuales en cinco años, toda vez que en 2017 el porcentaje era del 28.4. Por su parte, en el país el crecimiento fue de 3.5 puntos, al pasar de 20.2 a 23.7 por ciento.
De la población de 18 años y más en el país que manifestó haber sido discriminada en los últimos 12 meses, 30.6 por ciento lo atribuyó a su forma de vestir o arreglo personal (tatuajes, ropa, forma de peinarse, perforaciones).
Por su parte, un 27.5 por ciento declaró que fue por su peso o estatura; el 24.6 por ciento fue por opiniones políticas; el 23.7 por ciento, por ser mujer u hombre; mientras que el 21.6 por ciento destacó que fue por su manera de hablar.
Por creencias religiosas, el 19.9 por ciento de las personas señaló que fue discriminada; mientras que 16.5 por ciento fue por su clase social; en tanto, el 13.1 por ciento fue por su tono de piel.
En el país, 20.5 por ciento manifestó que se le negó injustificadamente alguno de sus derechos en los últimos cinco años. De este porcentaje, 21.3 por ciento correspondió a mujeres y 19.6 por ciento, a hombres.
De la población indígena de 12 años y más, 28 por ciento manifestó ser víctima de discriminación en los últimos 12 meses. De este porcentaje, 31.4 por ciento declaró que el motivo fue su forma de vestir o arreglo personal.
