Para el ejercicio fiscal 2023, el gobierno federal entregará subsidios por 7.2 millones de pesos a la Comisión de Búsqueda de Personas Desaparecidas en Puebla, lo cual representa una disminución de casi 60 por ciento respecto a los 18.8 millones de pesos que el organismo recibió el año pasado.
Así lo establece el convenio firmado por los gobiernos federal y estatal, en el marco de la Ley General en materia de Desaparición Forzada de Personas, el cual fue publicado el pasado 19 de junio en el Periódico Oficial del Estado (POE).
Según el documento, a partir de los primeros 20 días hábiles en que se reciban los recursos federales, el estado de Puebla deberá aportar 772 mil 500 pesos para la aplicación del concepto de compartición de los siete millones 725 mil pesos, dicho monto equivalente al 10 por ciento del monto total del subsidio autorizado.
El subsidio se destinará a fortalecer las capacidades para las acciones de búsqueda y localización de las comisiones locales de búsqueda.
También menciona que deberá haber transparencia en la distribución y aplicación de estos recursos, por lo que no se deberá destinar a conceptos de gasto distintos a los contemplados en los lineamientos que corresponden.
“A fin de garantizar la transparencia en la distribución, aplicación y comprobación de los recursos asignados para el cumplimiento de lo establecido en el numeral anterior, la “COMISIÓN”, la Secretaría de Planeación y Finanzas, en la cuenta bancaria específica, con característica de productiva, que constituya para la radicación de los recursos del Subsidio y de la coparticipación, deberá permitir la identificación de los recursos federales y estatales transferidos, según corresponda, y de sus respectivos rendimientos financieros, hasta su total aplicación”, destaca el informe.
Hay que recordar que, desde inicios de año, el colectivo Voz de los Desparecidos han criticado la falta de hallazgos y transparencia de la Comisión Estatal de Búsqueda.
Incluso señaló que, con la llegada de la pandemia, las solicitudes para apoyar a las familias en las jornadas de búsqueda en fosas clandestinas, así como el acompañamiento a los familiares, se ha ido acumulando y los trabajos se han hecho más lentos.
LPR
