Ante la elección del presidente de la SCJN que se hará este lunes, el presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que será una labor “hacia adelante” el “liberar” al poder judicial, pues actualmente está “secuestrado” y señaló que reconocerá al que sea electo.
En su conferencia de prensa matutina, manifestó que en los más de 30 años que duró el neoliberalismo, se “secuestraron” las instituciones, para ponerlas al servicio de los más ricos, por lo que es una labor a futuro el mejorar el poder judicial, pues actualmente “no tienen claro” lo que es la justicia.
Expresó que hace falta una renovación profunda en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y todo el poder, pues “se fue eclipsando con el dinero”.
Reiteró que su gobierno no buscó intervenir en dicho poder porque tenía que “optar entre inconvenientes” y no bastaba con cambiar a los ministros, ya que se trata de un problema que “viene de abajo hacia arriba y de arriba abajo”.
Cabe mencionar que los candidatos a la presidencia de la SCJN son: Yasmín Esquivel Mossa, quien está acusada de plagiar su tesis, Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, Javier Laynez Potisek, Alberto Pérez Dayán y Norma Piña Hernández, quienes sustituirán a Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.
López Obrador apuntó que su administración le dio prioridad a otras cosas, como el terminar con la corrupción, apoyar a la gente, entre otras y no intervenir en la SCJN.
Señaló que de los cuatro candidatos que propuso “dos nos dieron la espalda” al proyecto y descartó que tenga aspiraciones para “dominar” el poder judicial, pues no ocurre como antes que el presidente nombraba al titular de la SCJN.
Agregó que los “conservador” asumieron que Esquivel Mossa sería su “designada” para la SCJN, por lo que fue víctima de “toda una guerra de potentados, medios de información, columnistas, intelectuales, vendidos y alquilados”.
