El Grito de Independencia es uno de los eventos históricos más importantes de México ya que con este hecho se consuma el inicio de la independencia de México, bajo la dirigencia de Miguel Hidalgo y Costilla, y José María Morelos y Pavón. Esto fue el 15 de septiembre de 1810.
En aquella gesta heroica contra los conquistadores españoles, es decir, el virreinato, que tenía al pueblo de aquel entonces sometido para poder saquear el territorio, Hidalgo hizo un llamado para que el pueblo se levantará en armas y diera fin a la Nueva España.
En Dolores, Guanajuato, el Cura –cómo también es conocido históricamente- hizo sonar de las campanas de su parroquia y exclamó con fervor ante el pueblo, los motivos por los cuales no podían quedarse esperando sin participar de esta lucha. Es por esto que dicho evento es denominado como “El Grito”.
“Señores, somos perdidos; los franceses ya conquistaron España y vienen a conquistarnos a nosotros. Se acabó la opresión, se acabaron los tributos, se acabaron las gabelas”, mencionó Hidalgo.
Sin embargo, eso fue cambiando al pasar de los acontecimientos pues, de acuerdo al historiador Alfredo Ávila Rueda, cuando llegó Atotonilco y tomó el estandarte de Guadalupe es cuando dice: ¡Viva la virgen de Guadalupe! Cuando llega a San Miguel agregó: ¡viva San Miguel Arcángel!
De allí, vienen las arengas, proclamas que, desde 1840, se gritan con la finalidad de reivindicar la lucha independentista y a los personajes históricos; se fueron sumando personajes como Emiliano Zapata, Leona Vicario, ¡Viva el Bicentenario de la Independencia! y ¡Viva el Centenario de la Revolución! (en 2010).
Y en lo que va del actual gobierno se sumaron los “vivas” a los héroes anónimos, a la libertad, a la igualdad, a la justicia, a la democracia, a nuestra soberanía, a la fraternidad universal, a la paz y la grandeza cultural de México; además de declararle la muerte a la corrupción, al clasismo y al racismo.
