Luego de que el gobierno de Nicaragua, encabezado por Daniel Ortega, deportó a 222 opositores e impuso fuertes sanciones a otros 96, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, instó a ambas partes a dialogar y ofreció asilo político a los expulsados.
En su conferencia de prensa matutina, destacó que en diciembre del año pasado envió una carta a Daniel Ortega ofreciendo asilo político a una opositora que se encontraba presa y en mal estado de salud, así como su preocupación por las condiciones en el país centroamericano, la cual no tuvo respuesta.
Manifestó que el caso de Nicaragua es un asunto muy delicado, pues “nos da mucha tristeza la división que hubo”, ya que una parte de los encarcelados y expulsados del país son “Sandinistas”, al igual que el gobierno.
Y es que recientemente el gobierno nicaragüense expulsó del país a alrededor de 222 opositores, acusándolos de “traición a la patria” y a otros 96 les retiró la ciudadanía y les embargó sus bienes, entre ellos a la escritora Gioconda Belli.
Expresó que se debe privilegiar el diálogo en este caso como en otros conflictos que ocurren a nivel mundial, como la guerra Rusia-Ucrania.
Asimismo, informó que se han recibido solicitudes de nicaragüenses que buscan asilo en México, a lo cual, dijo, se les otorgará.
